El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Toledo ha estimado parcialmente el recurso que habían interpuesto los cuatro agentes de la Policía Local de El Casar de Escalona, contra la desestimación por silencio administrativo del Consistorio de la localidad toledana, de las solicitudes en materia de personal, abonos y acoso laboral, que fueron formuladas el 28 de noviembre de 2014.
La jueza ha recogido en el fallo el reconocimiento de "el derecho de cada uno de los demandantes a ser indemnizados con la cantidad de 2.500 euros" por todos los conceptos pendientes de reparación por el Ayuntamiento.
Respecto a la indemnización, la magistrada recoge en el tercer punto de los fundamentos de derecho que "se estima proporcionada y razonable" y califica el asunto del acoso laboral como "alta conflictividad".
Sin embargo, el documento recoge que en lo relacionado con el abono de las prestaciones por incapacidad temporal "pueden obtener reconocimiento independiente, en caso de acreditarse su procedencia".
La sentencia también se refiere a "el ánimo reparador de la nueva corporación que, según se manifiesta en el acto de la vista, ha contribuido de forma decisiva a pacificar la situación, dando satisfacción a parte de los pedimentos de los actores".
Durante la celebración de la juicio, ambas partes reconocieron que todos estos hechos, "suficientemente documentados" para este caso, son reprochables a las personas que en el anterior Gobierno municipal ostentaban los cargos de alcalde y teniente de alcalde.
Sin embargo, la jueza no cerró la puerta a que puede depurarse otro tipo de responsabilidades personales que puedan acreditarse en vía de regreso, si los interesados lo consideraran oportuno.
Este asunto se retrotrae a los años 2013-2014, periodo en el que los cuatro agentes (de los cinco que entonces estaban en la plantilla) causaron baja laboral debido a aspectos de naturaleza diversa, como: sufrir golpes de calor debido a las patrullas a pie que les fueron impuestas, además de turnos de vigilancia en puntos fijos, prohibición para utilizar el coche-patrulla, hipoglucemias.
Como hecho destacado, hay que mencionar el expediente disciplinario que se abrió -también por parte del anterior Gobierno local- contra dos agentes por haber tomado café estos durante el periodo de descanso dentro de su turno laboral. Esta medida conllevó la suspensión de empleo y sueldo durante un mes para los dos efectivos; pero la actual Corporación municipal (con el popular Israel Pérez al frente) archivó esta causa ante la inminente celebración del juicio.
Estos hechos, y otros que fueron recogidos en la documentación que se presentó en el juzgado, motivaron la denuncia por acoso laboral de estos cuatro agentes policiales.
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