Como cada 8 de marzo, el salón de plenos talaverano se convirtió en el escenario para celebrar el Día Internacional de la Mujer en un acto institucional al que asistieron colectivos de mujeres, vecinales, representantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, y ciudadanos en general. Después de agradecer el trabajo del Consejo de la Mujer y de la Concejalía de Igualdad, el alcalde, Jaime Ramos, reconoció que “aunque es un día de felicitación, todavía queda mucho por hacer”.
Posteriormente, el regidor leyó el manifiesto conmemorativo de esta fecha indicando que millones de personas en todo el mundo “alzamos la voz para reivindicar los derechos de las mujeres y luchar contra todas las discriminaciones por razón de sexo”. En el texto se recordaba que hace más de un siglo que lleva celebrándose este día “para reivindicar una sociedad más justa, equilibrada e igualitaria”, y lamentó que en muchos países “todavía les son negados a las mujeres los derechos fundamentales reconocidos en la Declaración Universal de Derechos Humanos, y en otros, aunque se les reconoce legalmente, no los disfrutan en condiciones de igualdad”.
Desde 1975, las Naciones Unidas fijaron este día como Internacional de la Mujer, un homenaje que deja evidencias de las “diferencias injustificables entre unos y otras y por eso compete a la Administración Pública actuar para que dejen de producirse, y el homenaje que corresponde es resolver con una verdadera implicación todo lo que aún hay de injusto en nuestra sociedad”. Hablando de injusticia y de discriminación, el argumento se refirió a los casos de maltrato y violencia, “en especial en los horribles crímenes machistas que asolan a nuestro país con datos estadísticos que nos obligan a ser firmes, precisos y claros en la lucha para erradicarlos”. Por todo ello, apostó por políticas públicas, reformas legislativas que garanticen la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, estrategias sociales y prácticas institucionales que mejoren la vida de las mujeres y den visibilidad a sus problemas; “son actuaciones imprescindibles e inaplazables que debemos acometer ya”. Jaime Ramos subrayó que hay que crear estructuras firmes, consensuadas y duraderas, capaces de canalizar los esfuerzos que se están desarrollando desde todos los ámbitos de la Administración. En concreto, desde el ámbito local “hay que continuar promoviendo el desarrollo de políticas que estimulen la eliminación de toda discriminación por razón de género”.
El manifiesto dejaba claro que la igualdad de género supone una mirada diferente sobre nuestras ciudades y pueblos “para hacer de ellos espacios de convivencia en los que mujeres y hombres deben compartir con idénticas condiciones el protagonismo de un tiempo nuevo”. Esa responsabilidad se traduce en acciones que políticas y políticos, funcionarias y funcionarios de los distintos servicios “deben transforma día a día la realidad con la que conviven y a la que se enfrentan”. Para finalizar, Ramos se refirió al “compromiso de toda la ciudadanía para sentar las bases que propicien una igualdad de oportunidades real”; ya que familias, sector educativo, empresas, instituciones públicas y privadas, y sociedad en general deben implicarse “porque no es cuestión de las mujeres, sino algo que atañe a la humanidad”, concluyó.
Por su parte, el subdelegado del Gobierno en Toledo, Fernando Sanz, abogó por la puesta en marcha de leyes a favor de la igualdad, como retribuciones salariales, conciliación de la vida laboral y familiar o la erradicación de la violencia de género.
PREMIADOS. También se aprovechó el acto para entregar los diferentes reconocimientos de los concursos relativos a este día. El V Premio de Investigación y Estudios de Género 'Ciudad de la Cerámica' recayó en el trabajo 'Sujetos a la violencia. Una aproximación crítica a la violencia sexual como discurso de género', de Cecilia Cienfuegos; dotado con 1.000 euros. Javier Salinas recibirá 600 euros por alzarse con el XVIII Certamen del Cartel conmemorativo del 8 de marzo, con la obra 'Tiempos de Igualdad'. En el XXIV Certamen Literario, Alfonso Sergio Barragán ganó, en el apartado de narrativa, con su obra 'Al otro lado', e Isabel García Viñas, en poesía, con 'En la conferencia de empresa. Ambos premios están dotados con 600 euros. El accésit quedó desierto.