Tras este merecido descanso navideño vuelvo a escribir en el semanal que me da de comer.
Gracias a las peticiones de grandes amigos y convecinos, retorno a la costumbre de compartir mi punto de vista desde 100 kilómetros y 20 metros.
El pasado jueves, 7 de enero, llegaba a mis manos unos de los ejemplos más claros de lo que es ignorancia pura y dura. Hablo de el artículo que escribe nuestro querido amigo D. J.L.M, redactor de la Tribuna de Toledo, en el que se digna a compartir la situación de la calle Corredera del Cristo y alrededores. En él aparece una declaración del portavoz de la Asociación del Comercio de Talavera (ACT), D. Julián Gómez, diciendo que, los comerciantes de la calle mencionada anteriormente están a favor de que su calle siga siendo peatonal tras la campaña navideña.
Me dirijo a D. J.L.M para preguntarle si esa información, que obtuvo él, la ha corroborado. Yo creo que todo periodista que se dedique a compartir información en un medio de comunicación, tiene el derecho y el deber de corroborar todo aquello que publique. Lo que no se puede hacer es fiarse de las habladurías de un imagen pública, por muy importante que sea, que –por otra parte– no reside ni en el centro del que dice ser portavoz.
Si algo he aprendido de uno de los mejores periodistas que conozco, D. J.A.R.B. (ya que le gusta usar siglas, usémoslas todos) es que un titular es una de las cosas más importantes de un artículo y lo que no puede hacer usted es poner como titular una mentira más grande que el rosetón de la Colegial. ¿Por qué no se ha molestado en preguntar a los comerciantes de la Corredera si eso que dice D. Julián Gómez es cierto? Yo lo he hecho y, compañero, no están a favor de lo que usted dice.
Por último, y sigo leyendo su artículo, dice: “La rehabilitación de la zona Charcón ha permitido a Talavera reactivar uno de los enclaves que parecía vivir de espaldas a los propios Talaveranos”. Permítame una carcajada. En la zona Charcón se ha instalado unos badenes del tamaño del puente colgante de Barreda. Este desmesurado tamaño, falto de lógica y razonamiento, ha causado la rotura de los bajos de dos Eborabus y, la medida que ha llevado a cabo la empresa de transporte de Talavera ha sido que, “los autobuses ya no pasen por ahí”. Creo que eso un problema bastante gordo que no reactiva una mierda, diciéndolo mal y pronto, la zona que decía usted estar escondida. En mi opinión, yo creo que en una ciudad, sea cual sea, lo más importante no es que sea bonita y que tenga muchos arbolitos, sino que sea útil y efectiva. Piénsenlo. Un cordial saludo, Luis Alberto Retana Godoy, con todas las letritas.