El hermano Miguel Pajares, natural de la localidad toledana de La Iglesuela, tiene ébola, según los resultados que le realizaron el pasado lunes. En total han sido cinco personas las que han dado positivo en estas pruebas, otras dos religiosas, un médico y un técnico de laboratorio. De esta forma, Miguel Pajares continúa aislado en el Hospital San José de Monrovia (capital de Liberia), con fiebre alta y evidente estado de debilidad. En la jornada de ayer, el propio religioso pidió volver a España junto a las otras tres hermanas que permanecen aisladas con él.
La ONG Juan Ciudad ya ha comenzado con las gestioes para poder trasladarlo a España a través del Ministerio de Exteriores y de Sanidad, aunque la decisión en última instancia será de la subdirección de Sanidad Exteriores, del Ministerio de Sanidad, que será quien dirija el protocolo a seguir. El Hospital San José de Monrovia sigue cerrado y en cuarentena desde la muerte de su director, Patrick Nshamdze, que estuvo casi dos semanas luchando contra el ébola. Todos el personal sanitario que estuvo en contacto con él fue aislado para prevenir.
De momento, el Ministerio de Exteriores desaconseja viajar a Liberia, Sierra Leona y Guinea, donde la epidemia se ha desatado con mayor virulencia.
El hermano Miguel Pajares tiene 75 años es miembro de la orden de San Juan de Dios y superior del hospital católico San José de Monrobia. Tras conocerse la muerte del director del centro hospitalario, Pajares pidió que realizaran las pruebas a los que tuvieron contacto con él para verificar si estaban contagiados. De los más de 1.300 enfermos diagnosticados, cerca de 800 han fallecido.
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