Los padres de una niña enferma de cáncer encontraron una revelador mensaje en el reverso de un espejo tras la muerte de la joven en la que hacía una profunda reflexión de la vida. Athena Orchard, de 12 años, escribió unas 3.000 palabras en las que aseguraba que "cada día es especial, al menos la mayor parte de él. La vida es sólo malo si lo haces mal " o que "la felicidad depende de nosotros mismos". Un mensaje con el que sus padres se quedaron conmovidos y muy sorprendidos por la espiritualidad de su hija, que deja tras su muerte deja a nueve hermanos.