‘Donde está enterrado como hay chaparrillos bajos y jaras, ahí no se mete nadie a mirar. Y luego las hojas secas que echamos...’

Rufino: Donde está enterrado como hay chaparrillos bajos y jaras, ahí no se mete nadie a mirar. Y luego, las hojas secas que echamos… Ahí ha crecido la hierba y todo. Ahí no se mete ni Dios a mirar.

Flores: Está claro que no.

Rufino: Y el barro seguro que se ha hecho una pasta dura ya. Con todo el sol de la vega que ha dado y con la calorina se ha hecho una pasta. ¿Porque estaba medio mojado el barro, no?
Flores: Sí, estaba chispeando ese día.

Rufino: Está muy bien escondido. Vamos, que lo están pisando y no lo ven.

Flores: Seguro.

Rufino: Pero luego los abogados tienen muchas leyes, lo saben todo. Otra cosa es que ahí te cojan tu…
Flores: ¿Las huellas?
Rufino: Las huellas, mientras no cojan las huellas no te van a tocar los cojones. Aunque le encuentren allí arriba, con toda la humedad que ha habido dentro del saco, todo eso no transpira, estaría buena que salieran las huellas. Ahí te digo yo que no sale nada.

Flores: ¿Y qué dice el periódico?
Rufino: Viene que encontraron el rifle del cazador.

Flores: Que no hombre que no, que ahí no pueden encontrar eso. ¿Quién se va a meter allí?
Rufino: Está muy difícil que encuentren ese agujero tan pequeño.

Flores: Que no, que no…
Rufino: Pero si le hubieran encontrado habría huellas. Pero no creo que hayan cogido ninguna en claro. ¿Pero es raro, porque no sé si lo cogimos con guantes?
Flores: Y las balas igual.

Rufino: Pero las huellas no van a salir enteras, y tienen que salir enteras, amigo. Si sólo sale un "cachín" de huella, eso no quiere decir nada.