Los precios de la vivienda en Talavera, entre los 31 más bajos de España

Los precios de la vivienda en Talavera de la Reina siguen cayendo y ya se sitúan como los quintos más bajos de Castilla-La Mancha, con 856,20 euros/metro cuadrado, solo por delante de otras localidades como Almansa (790,30 euros/metro cuadrado), Puertollano (769,40 euros), Tomelloso (702,50) y Hellín (650,50); según los datos del Ministerio de Fomento en cuanto a los precios de vivienda libre de los municipios mayores de 25.000 habitantes, correspondientes al primer y segundo trimestre del año 2013.

Según señala la Asociación de Afectados por la Ponencia de Valores (APOVATA), el precio que les asigna la Agencia Tributaria, para el cálculo del Impuesto de Transmisiones, es aún superior al asignado por la Ponencia de Valores. El precio de la vivienda está cayendo en la Ciudad de la Cerámica hasta el punto que “el precio de oferta de los pisos está aún por debajo de lo que señala la estadística de Fomento”, insiste APOVATA, refiriéndose a las cantidades por las que ofertan viviendas en las agencias inmobiliarias.

En el mismo orden, los datos oficiales del Ministerio de Fomento sitúan a Talavera entre las 31 ciudades españolas (de más de 25.000 habitantes) con el precio de la vivienda más bajo. El ránking de precios más bajos lo encabeza Elda (Alicante) con 648,50 euros/metro cuadrado.

PRECIO SUELO. Respecto al precio del suelo señalan que “el resultado es aún peor”, ya que “realmente, el suelo urbano y/o urbanizable no tiene precio”. Con estas estadísiticas en la mano, Apovata se reafirma en su postura dos años después de ponerla de manifiesto: “nuestra situación económica y de desarrollo no justifica el nivel impositivo que tenemos”. De la misma forman, atisban que “de continuar por aquí, prevemos nuestra regresión económmica hasta niveles difícilmente superables”. También recordando el descenso poblacional en los últimos años, Apovata considera que para romper la tendencia es necesaria una nueva Ponencia de Valores, la recificación del POM, una reducción drástica de la presión fiscal y una reducción real del gasto de la Administración local. A su juicio, es esencial potenciar la economía de las familias, de las pequeñas y medianas empresas y de los autónomos.