Los hombres con sobrepeso que compiten al pádel son los que más se lesionan

Ser hombre con sobrepeso aumenta las posibilidades de sufrir una lesión si se juega al pádel. Si además se practica desde hace más de cinco años, en césped artificial desgastado, en sesiones de más de dos horas y con afán competitivo, el riesgo se incrementa aún más.

Estas son algunas de las conclusiones del segundo “Estudio epidemiológico de las lesiones en el deporte de ocio”, realizado por FUNDACIÓN MAPFRE en colaboración con la Universidad Politécnica de Madrid (UPM). El objetivo es estudiar qué lesiones son más frecuentes, los factores que las producen y sus consecuencias, así como ofrecer una serie de recomendaciones que contribuyan a que la práctica del pádel, que ha experimentado un aumento progresivo en los últimos años, sea lo más segura y saludable posible.

El informe, resultado de una encuesta en la que han participado jugadores aficionados, destaca que los hombres se lesionan más que las mujeres, y que entre los lesionados existe un alto porcentaje de personas con sobrepeso (41,5 por ciento).

La investigación también revela que los hombres que juegan con afán competitivo tienen más del doble de riesgo de sufrir una lesión que aquellos que practican este deporte por ocio. Asimismo, los que juegan al pádel en sesiones de 2 a 3 horas seguidas y los que practican este deporte desde hace más de cinco años tienen también el doble de riesgo de lesionarse que aquellos que juegan durante menos tiempo o los que tienen menos experiencia.

Entre las lesiones más frecuentes en los jugadores de pádel destacan los esguinces de tobillo (17 por ciento), contracturas musculares (14,5 por ciento), epicondilitis o codo de tenista (8,5 por ciento), roturas musculares de gemelo (8,5 por ciento), tendinitis de hombro (7 por ciento), tendinitis de rodilla (6 por ciento), y lumbalgias (5,5 por ciento), entre otras.

Para prevenir y reducir la gravedad de las lesiones relacionadas con este deporte, FUNDACIÓN MAPFRE y el equipo de investigación de la UPM, en colaboración con la Federación Española de Pádel, han editado una guía con recomendaciones entre las que aconsejan: realizar ejercicios preventivos dos veces por semana, evitar las superficies de hierba artificial excesivamente desgastada, recoger las bolas sueltas por la pista, hidratarse bien y calentar antes de jugar y estirar después. También se recomienda utilizar material específico: calzado deportivo de pádel o en su defecto de tenis, pala redonda si la técnica no es avanzada, de unos 360-365 gramos para mujeres y unos 365-375 para hombres, y pelotas que no estén muy usadas.