ha condenado una nueva agresión sufrida ayer en el Punto de Atención Continuada (PAC) del centro de salud de Añover de Tajo con amenazas de muerte a una enfermera.
Una mujer había solicitado por teléfono atención domiciliaria para su madre, pero el equipo médico no podía acudir porque estaba atendiendo una crisis hipoglucémica y procedió a remitir una ambulancia. Descontenta porque no se habían podido personar en el domicilio, la mujer acudió al centro de salud intentando agredir físicamente a la enfermera, que afortunadamente se protegió y no sufrió ninguna lesión.
La mujer rompió la puerta de Urgencias y amenazó a la enfermera señalándole que “te voy a matar” y “te voy a coger del pescuezo y te lo voy a retorcer”. Un acompañante de la mujer, que había acudido al centro de salud con ella, logró sujetarla y calmarla para evitar que estas agresiones verbales y materiales cobraran una gravedad mayor.
La semana pasada se produjo otra agresión cuando dos mujeres se abalanzaron sobre una facultativa, ocasionándole arañazos en el rostro y diversos hematomas.
CSIF ha señalado "el terrible impacto negativo que provocan estos incidentes violentos. No sólo estamos hablando de lesiones físicas, cuando se producen, sino que deja unas heridas enormes: ansiedad, estrés, depresión o síndrome de burnout. Además, provoca un deterioro grave del sistema sanitario, creando un ambiente hostil que afecta a la calidad de la atención y que incide además en la fuga de profesionales".
CSIF también ha insistido "en la necesidad de que todos los centros de salud cuenten con personal de vigilancia: es preciso garantizar la seguridad de los profesionales. Asimismo, el Gobierno debe reconocer a profesionales sanitarios como autoridad pública en el ejercicio de sus funciones con el objetivo de endurecer las penas por agresiones".
Esta misma mañana, a las 12.15 horas, hay convocada una concentración a las puertas del centro de salud para condenar estas últimas agresiones.