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(Fotos) ¿Qué son los ‘Moharraches’? La sorprendente historia de una fiesta prohibida

Moharraches de Pelahustán (Foto: Pablo Salinas Moreno).

SIERRA DE SAN VICENTE

Esta tradición de Pelahustán presenta muchas similitudes con otras mascaradas de invierno de la España rural

LVDT | Miércoles 04 de diciembre de 2024

El pasado 30 de noviembre, durante las luminarias en honor a San Andrés de Pelahustán (Toledo), en la Sierra de San Vicente, aparecieron dos enigmáticos personajes: los Moharraches. Esta tradición, de raíces precristianas, había quedado casi en el olvido, reducida a unos pocos vestigios intermitentes en las hogueras de San Andrés.

Hasta ahora, lo que perduraba era el gesto de los jóvenes ataviados con cencerros para saltar las hogueras, un eco de los antiguos Moharraches, quienes además se disfrazaban con sacos, harapos viejos y máscaras grotescas. -Ver imágenes al final del texto-

Registros históricos, como antiguos legajos criminales, sugieren que los Moharraches tenían una presencia importante en las festividades locales, realmente su “día grande” era San Blás, pero aparecían en otras celebraciones a lo largo del año como San Andrés, incluso durante las procesiones religiosas, animando el jolgorio del pueblo.

Su carácter irreverente, sin embargo, acabó enfrentándolos con las autoridades: en 1731, la tradición fue prohibida por el cura y el alcalde, lo que provocó una revuelta en la que vecinos apedrearon la casa del alcalde y quemaron las puertas de la iglesia.

A raíz de estos acontecimientos, la tradición comenzó a diluirse. No obstante, algunas crónicas del siglo XIX vuelven a mencionar a los Moharraches (y otro singular personaje la Vaquilla), aunque ya en menor escala. A principios del siglo XX, la costumbre reapareció de forma simplificada, con jóvenes que, sin máscaras, portaban cencerros mientras saltaban las hogueras de San Andrés.

Esta tradición presenta muchas similitudes con otras mascaradas de invierno de la España rural, muchas de las cuales también fueron prohibidas en el siglo XVIII por mezclar elementos paganos y religiosos. Estas expresiones populares, consideradas indecorosas en su momento, compartían un simbolismo común en las comunidades rurales.

En las últimas décadas, numerosos pueblos han apostado por revitalizar estas tradiciones ancestrales. Ejemplos de ello en nuestra provincia son los Perros de San Sebastián en Santa Ana de Pusa, los Cirigüelos de El Real y los Morraches de Malpica. También destacan los Harramachos de Navalacruz, los Machurreros de Pedro Bernardo y los Zamarraches de Casavieja, en el vecino Gredos y el Valle del Tiétar.

"Esperamos que los Moharraches vuelvan a recorrer en mayor número si cabe, las calles de Pelahustán y que esta tradición ancestral, recuperada por la iniciativa popular, se consolide como una seña de identidad, un motivo de celebración y unión, y un atractivo para nuestra localidad".

(Desde Moharraches de Pelahustán queiren expresar su agradecimiento a David Morales por su artículo "Mascaradas de Invierno", que nos inspiró a investigar y trabajar en la recuperación de esta fascinante tradición).

Fdo: Moharraches de Pelahustán
Fotos: Pablo Salinas Moreno

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