La Unidad de Cuidados Paliativos de la Residencia Social Asistida 'San José' contará con una inversión de 300.000 euros de la Diputación de Toledo para un espacio con 14 habitaciones en 900 metros cuadrados, que prevé su apertura el próximo año 2025.
Así lo han puesto de manifiesto en rueda de prensa la presidenta de la Diputación de Toledo, Concepción Cedillo, y el vicepresidente de Bienestar Social, Familia y Juventud, Daniel Arias.
Cedillo ha resaltado la inversión de 300.000 euros de la Diputación en una unidad de 14 habitaciones individuales con baño asistido independiente y con cama para acompañante. "Crearemos así un espacio que refleja la voluntad de humanizar este momento a través de un espacio donde el confort y el respeto a la intimidad se combinan con la asistencia profesional más cualificada", ha señalado.
También contará, ha dicho, con más de 150 metros cuadrados de zonas comunes para enfermos y familiares y 750 metros de jardines adaptados y accesibles, "pensado para mejorar la calidad de vida, la dignidad y la autonomía hasta el final".
"Un proyecto que nace de la sensibilidad de este Gobierno provincial con la necesidad de seguir avanzando en la humanización de la sanidad, en el abordaje integral de pacientes sanitarios y en el cuidado de los enfermos en todas las etapas de su enfermedad, también en el final de su vida", ha sostenido.
Bajo el punto de vista de Cedillo, el objetivo de esta unidad es ofrecer los mejores cuidados, aliviar el sufrimiento y hacerlo garantizando la mayor comodidad posible a personas con enfermedades avanzadas e irreversibles, así como a sus familias, "para que puedan afrontar este proceso complicado y doloroso, no solo con los cuidados necesarios y sabiendo que están en las mejores manos".
De su lado, el vicepresidente de Bienestar Social, Familia y Juventud de la Diputación ha señalado que esta actuación "es un proyecto de personas que han pensado en cómo mejorar la vida de otras personas", que nace de una necesidad fruto de conversaciones entre distintas administraciones.
Con todo, ha dicho que los objetivos de esta Unidad son aliviar el sufrimiento de los pacientes, mejorar su calidad de vida hasta el final y promover su dignidad y autonomía, "facilitando la muerte en paz con respecto a los valores y necesidades del paciente y ofreciendo el apoyo a las familias durante la enfermedad y después en la etapa de duelo".
Para ello, ha proseguido, se contará con un equipo interdisciplinar con formación en cuidados paliativos y habilidades para poderse comunicar con los pacientes y con las familias. "Se establecerán circuitos ágiles de derivación desde otros servicios sanitarios y coordinación entre las distintas administraciones mediante sistemas de información".
En cuanto a infraestructuras, ha explicado que habrá 14 habitaciones individuales con baño adaptado, con una segunda cama para un familiar, para un acompañante; despachos para consultas y reuniones de equipo, almacén para material y medicación específica y jardines tanto interiores como exteriores para mejorar la calidad de los últimos días de vida que tengan los residentes.
Arias ha destacado que esta Unidad de Cuidados Paliativos tendrá un acceso propio desde la calle, lo cual ha calificado como "fundamental" para preservar la intimidad de las personas.
La atención estará centrada en el paciente y la familia con un plan de cuidados individualizado y revisado periódicamente; a lo que el vicepresidente de la Diputación ha añadido que los profesionales contarán con formación continuada, destacando la investigación y el intercambio de información con otras instituciones como la universidad como algo "fundamental".
En cuanto a la coordinación y continuidad asistencial, Arias ha hablado de protocolos de derivación y criterios de admisión en coordinación entre otros niveles asistenciales, para incidir en la historia clínica compartida. "Nos parece fundamental y nos gustaría conseguir no solo para ellos, sino para toda la Residencia Social Asistida".
A preguntas de los medios sobre los plazos que maneja la Diputación, el vicepresidente ha señalado que la semana pasada salió la licitación y actualmente el proyecto está en fase de adjudicación. "Una vez que se adjudique, ya entraríamos en la parte de la firma y, luego, el periodo de obra máximo es de cinco meses por lo que esperamos que en el primer trimestre o algo más de 2025 la Unidad de Paliativos esté terminada".
También ha afirmado que con la apertura de esta Unidad, que es la única en un centro sociosanitario de estas características en toda la región, la Residencia no va a perder plazas y que el personal que trabajará en ella será de la Diputación, aunque ha señalado que es posible que haya que contratar personal específico. Algo que la Institución provincial está valorando.
Durante la rueda de prensa ha tomado también la palabra el director de Área de Bienestar Social, Familia y Juventud, Ricardo Abengózar, quien ha afirmado que la colaboración entre el Sescam y la Diputación para la puesta en marcha de esta Unidad es "estrechísima" y se basará en que el Servicio de Salud castellanomanchego derivará a los pacientes cuando sea necesario y facilitará la historia clínica.