Un total de 59 estaciones de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) registraron 40ºC o más este domingo y la de Minas de Almadén (Ciudad Real) alcanzó los 42,4ºC.
De cara a este lunes, habrá temperaturas elevadas en el tercio este peninsular y un descenso extraordinario de los termómetros en el Cantábrico en un día con aviso naranja por calor en zonas de Zaragoza y por lluvias en Huesca. Camacho ha explicado que, con el inicio de semana, se cierra el episodio de ola de calor.
Durante la jornada de este 11 de agosto, se registraron temperaturas máximas iguales o superiores a 40ºC en un total de 59 estaciones de la red de AEMET en Cantabria, País Vasco, Castilla y León, La Rioja, Navarra, Aragón, Extremadura, Madrid, Castilla-La Mancha y Andalucía. Por otro lado, las comunidades del Mediterráneo se salvaron por los vientos de componente este y Galicia y Asturias lo hicieron por la entrada de aire atlántico.
Concretamente, el portavoz ha señalado que las cinco temperaturas más altas registradas ayer se dieron en la estación de Tama (Cantabria), que marcó 43,1ºC; la de Bilbao-Sondica (País Vasco), con 42,9ºC; la de Ramales de la Victoria (Cantabria), con 42,7ºC; y la de Cazorla (Jaén) y Minas de Almadén (Ciudad Real), con 42,4ºC. Asimismo, dos estaciones clásicas en lo que respecta a registrar temperaturas máximas como Ecija (Sevilla) y Montoro (Córdoba) quedaron en los puestos 19 y 43 del ranking con 41,0 y 40,3 grados respectivamente.
Con respecto al caso de la estación de Tama (Cantabria), Camacho apunta a que hubo una enorme variación de temperatura, con una mínima de 17ºC al amanecer, desde la que se pasó a temperaturas superiores a 40ºC. De hecho, el valor máximo estuvo en 43,1ºC y las temperaturas cayeron brúscamente 13ºC en hora y media.
Según ha detallado el portavoz de AEMET, el fenómeno de calentamiento se explica por los vientos de componente sur que hicieron descender el aire de la meseta norte y valle del Ebro. Este aire estaba recalentado por estos días pasados de alta insolación y poca ventilación, a lo que se añadió un calentamiento adicional por efecto del descenso de altura desde la meseta a los valles o a la costa.
Por otra parte, el importante enfriamiento posterior se debe al cambio brusco en la dirección del viento. De esta manera, entró el aire del cantábrico de manera súbita y ocasionó un fenómeno de "galerna", aunque poco intensa en este caso, con cambio de viento y bajada muy notable de las temperaturas.
En este sentido, Camacho ha explicado que muchos observatorios de la zona costera desde Galicia al País Vasco registraron ese cambio y obtuvieron rachas máximas de viento tras la entrada del aíre más fresco.
Por ejemplo, el registro del cabo Matxixako en Vizcaya reflejó dicho fenómeno. Asimismo, en lo que tiene que ver con el viento, Camacho ha detallado que entre las rachas máximas registradas ayer destaca Sierra Nevada con 97,2 kilómetros por hora (km/hora) seguida de Estaca de Bares (Coruña) con 79,2 km/h y Cape of Matxitxako (País Vasco) con 73,1 km/h.
De cara a esta semana, el portavoz indica que habrá un cambio generalizado de las condiciones del tiempo, sobre todo en la mitad norte de la Península. Así, habrá temperaturas significativamente elevadas en el tercio este peninsular, valles atlánticos del centro y sur, Baleares y Canarias y un descenso notable y localmente extraordinario de las máximas en el Cantábrico. Además, se mantiene el aviso naranja por temperaturas máximas en la Ribera de Zaragoza y están activados avisos narajas por tormentas y lluvias en Pirineos de Huesca y centro de la provincia de Huesca.