El pasado 06 de julio de 2024, se iniciaba sobre las 10:00 horas aproximadamente, un incendio forestal muy cerca de las viviendas de la Urbanización “Nuevo Borox” —tal y como informó este mismo medio— en la localidad toledana de Borox, la zona afectada está consideraba como interfaz urbano-forestal, donde se entremezclan viviendas, urbanizaciones y polígonos industriales con terreno agrícola y masas forestales.
En la mañana del día 6 de julio, y una vez se activó el dispositivo de Infocam por el 112, además de Guardia Civil, actuaron en el lugar diversos medios aéreos y terrestres, agentes medioambientales, Bomberos, Policía Local, medios del ayuntamiento de Borox e incluso Bomberos de la Comunidad de Madrid. Cerca de las 10:45 horas se decretó el Nivel 1 de riesgo por posible afección a viviendas de la Urbanización “Nuevo Borox”, desalojando hasta 70 personas y 35 viviendas.
Se vivieron momentos de pánico al quedarse cercada por el fuego una cosechadora en un terreno de labor próximo, por la velocidad de las llamas y el fuerte viento reinante, que llegó a alcanzar en algunos momentos hasta los 40 km/hora en ese día. Finalmente no se produjeron desgracias personales, aunque sí tuvieron que ser atendidas varias personas por los servicios de asistencia médica allí desplazados.
La Guardia Civil identificó a una persona de 91 años el mismo día del siniestro, quién se encontraba en las inmediaciones de la zona donde se inició el incendio, en principio por el riesgo que ello suponía para su integridad física. Al día siguiente, cuando el Seprona de Illescas estaba en las inmediaciones de la zona afectada, se encontró a este mismo individuo amontonando residuos y recogiendo desechos de los alrededores.
Posteriormente, y fruto de las investigaciones practicadas, se procede a la detección del mismo. El varón reside a escasos treinta metros de la zona donde empezó el incendio, siendo puesto a disposición judicial el pasado jueves 11 de julio, decretando medidas cautelares contra esta persona por el propio órgano jurisdiccional.
El delito de incendio forestal, según el vigente Código Penal, puede castigar con penas de uno a cinco años de prisión al autor/es, pudiendo ser elevadas a penas de cárcel de 10 a 20 años si el incendio ha comportado un peligro para la vida o integridad física de las personas.
El Seprona recomienda para evitar incendios forestales no arrojar colillas en zonas forestales o desde vehículos, no encender fuego en épocas de peligro en el monte, no utilizar herramientas que puedan generar chispas, no dejar abandonadas basuras o residuos.
Si observas un incendio debes comunicarlo a la mayor brevedad al 062/112, dando la mayor información posible respecto a su ubicación y circunstancias para su rápida extinción y evitar daños personales.