Los efectos de la DANA ya se están dejando sentir en gran parte del país, con la formación de tormentas muy fuertes que a su paso han dejado aguaceros intensos, bastante actividad eléctrica, granizo o pedrisco y vendavales. Además, esta "gota fría" está impulsando una lengua de polvo sahariano hacia el centro, este y Baleares.
Las comunidades que previsiblemente se verán más afectadas serán Aragón, Asturias, Cantabria, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Galicia, Madrid, Navarra, País Vasco y La Rioja.
El modelo de cabecera de Meteored muestra que allí donde se produzcan los chubascos más violentos pueden acumularse hasta 30 l/m² (e incluso puntualmente más) en una hora, por lo que hay riesgo de inundaciones súbitas en barrancos o ríos. La probabilidad de granizo o pedrisco es alta, situación que por otra parte es normal por estas fechas.
Varios de estos núcleos pueden presentar un alto grado de organización, y los mapas no descartan la formación de algún sistema convectivo, por lo que habrá que vigilar la evolución de estas tormentas en las próximas horas, ya que tendrán el potencial suficiente para repartir varios fenómenos adversos.
Las lluvias irán acompañada de barro, ya que la DANA está canalizando una masa de aire cálido cargada de polvo sahariano, con concentraciones más importantes a orillas del Mediterráneo y en Baleares.
Esta situación se mantendrá hasta el viernes-sábado, cuando la bolsa de aire frío cruzará la Península, dejando a su paso una situación bastante adversa y un descenso térmico casi generalizado.