Las empedradas y estrechas calles del Casco Histórico de Toledo volvieron a ser escenario de dos procesiones que salieron en una noche en la que todas las miradas estaban puestas en el cielo y la previsión de lluvia.
El alcalde de Toledo, Carlos Velázquez y otros concejales de la corporación municipal que han participado en la procesión del miércoles santo de la Cofradía de la Hermandad del Santísimo Cristo de la Humildad.
La imagen del Cristo es una talla algo menor del tamaño natural, en madera de cedro policromada al óleo. Representa el momento en que el Señor acaba de llegar al Calvario y aparece sentado sobre una roca, exhausto y meditando. –Puedes ver las imágenes al final de esta noticia–
Las andas son portadas a dos hombros debajo del paso por 28 hermanos cargadores. Además, realiza una parada del paso ante el Convento de San Antonio de Padua, donde las monjas desde el patio le reciben y le cantan.
La procesión salió del Monasterio de San Juan de los Reyes y prosiguió por la calle Reyes Católicos, calle del Ángel, plaza de San Antonio, calle Santo Tomé, plaza de El Salvador, calle Trinidad, calle Hombre de Palo, Cuatro Calles, calle Comercio, calle Toledo Ohio, plaza de la Ropería, calle Plata, plaza de San Vicente, calle Alfonso X el Sabio, plaza del Padre Juan de Mariana, calle Alfonso XII, calle Rojas, plaza de El Salvador, calle Santo Tomé, plaza de San Antonio, calle del Ángel, calle Reyes Católicos y por último entró en la iglesia de San Juan de los Reyes.
Esta no fue la única procesión que recorrió la noche del Miércoles Santo la capital toledana. También procesionaron el Capítulo de los Caballeros Penitentes de Cristo Redentor, que salieron en una procesión, que está organizada como un Vía Crucis con catorce estaciones por las calles de la capital regional.