OPINIÓN

Macarras y perros

Alberto Retana

CARTA DEL DIRECTOR

Escrita por Alberto Retana, director de La Voz del Tajo

Alberto Retana | Miércoles 20 de marzo de 2024

Macarras ha habido toda la vida, sobre todo en los recreos del colegio o en las plazuelas de los barrios. Siempre se les reconocía a la legua por sus andares, por su chulería o por las habladurías de los más enterados del lugar. En cada zona había un macarra que, con los años, demostraba lo que era capaz de ser o de hacer pero generalmente la vida era la que ponía a cada uno en su sitio.

Hoy en día, a estas alturas del siglo XXI, hay macarras que se permiten el lujo de amenazar a periodistas y aunque nuestra profesión no sea la más corporativa del mundo, yo sí romperé hoy una lanza para que gente como Miguel Angel Rodríguez y quienes le protegen salgan del mundo público.

En su lugar, ya tienen bastantes perros en las redes sociales que se esmeran en olfatear cualquier foto, cualquier dato –aunque tengan que inventárselo y fabricarlo– para dejar su meadita en cada esquina poniendo a caldo a quien expone su identidad a diario, sea de izquierdas, de derechas o de ninguno de los dos lados.

Queda claro que Ayuso no está gestionando nada bien este carrito de la fruta como tampoco lo supo administrar Pedro Sánchez con su particular Koldo, pero cada uno es responsable de sus decisiones y hay que afrontarlas según vienen.

Aún estamos digiriendo la maldita amnistía cuando Puigdemont, el trilero mayor del reino, ya valora referéndums, cupo catalán o independencia unilateral sin rasgarse las vestiduras. Vamos, está para darle uno de los premios Ciudad de Talavera en las próximas Mondas, en las que parece que las cosas no andan tan claras como deberían y algunos que daban lecciones en el pasado ahora están a punto de recibir golpes de regla en las yemas de los dedos, al más puro estilo de colegio religioso antiguo.

Misterios nos aguardan por esas Mondas talaveranas que sucederán a la Semana Santa como misterioso ha sido el hallazgo de cuatro cadáveres en una casa del casco antiguo de Toledo. Eso si es un caso para tener miedo, tanto como el del guardia civil paisano que está hospitalizado tras ver cómo un camionero arrasaba un control de la Benemérita y asesinaba a seis personas. Esperemos que la recuperación sea rápida y total.


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