En un mundo cada vez más digitalizado, donde la hiperconexión coexiste con el aislamiento de las zonas en situación de despoblación, Cruz Roja ha emprendido un llamado a la juventud para unirse a ‘La Red Social más Social’, la que forman las personas voluntarias. La campaña utiliza las redes sociales para invitar a los jóvenes a tomar partido y prestar atención a los pueblos, haciéndoles conocedores de la problemática de la despoblación, y reconociendo el potencial de estas comunidades. La campaña destaca la necesidad de preservar el patrimonio y las tradiciones de la España despoblada, conectando con sus habitantes y apoyando a las personas en situación de vulnerabilidad. Todo ello a través del voluntariado.
La iniciativa se suma a otras estrategias de Cruz Roja, como el Reto 1213, para dar nueva vida a las zonas despobladas, mejorar la calidad de vida y promover el acceso a derechos en igualdad de oportunidades. Existe un gran abanico de actividades voluntarias que pueden desarrollarse en este marco, que van desde las manualidades, pasando por el apoyo en las tradiciones de las fiestas patronales, tan importantes para los pueblos, como la ayuda en los huertos. Cruz Roja espera que ‘La Red Social más Social’ inspire a la juventud a participar activamente, creando conexiones valiosas y construyendo un puente entre la hiperconexión digital y las comunidades rurales en busca de apoyo y solidaridad.
Bajo la premisa de que ‘no hay nada tan social como compartir tiempo’, Cruz Roja invita a la participación activa de la juventud en esta red única: el voluntariado. Y es que las personas jóvenes pueden aportar tiempo y energía, un recurso muy valioso en la lucha contra la despoblación. Así mismo, se busca desafiar el estigma de que los y las jóvenes no están presentes en las zonas rurales, y revitalizar la acción voluntaria en los lugares en los que tienen sus raíces.
La campaña se apoya en testimonios reales, como el de Marta, Jacobo y Sofía, jóvenes voluntarios que comparten sus experiencias en un emotivo vídeo. Estos testimonios resaltan cómo el voluntariado no solo beneficia a las comunidades rurales, sino que también enriquece la vida de quienes participan.
Marta comparte su experiencia haciendo manualidades con personas mayores, destacando la alegría que aporta a ambas partes; Jacobo cuenta su vocación por llevar la lectura a las zonas más recónditas del territorio; y Sofía destaca la importancia de llenar el vacío en las zonas despobladas mediante el voluntariado, aportando una nueva perspectiva y una conexión significativa.
Esta campaña de sensibilización, respaldada por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 a través de la asignación tributaria de la casilla de la Renta, cobra especial relevancia este 5 de diciembre, que se celebra el Día Internacional del Voluntariado.
La presidenta de Cruz Roja Española, María del Mar Pageo es la primera en felicitar el día a los más del 263.531 voluntarios y voluntarias que forman Cruz Roja en España en la actualidad. A través de sus redes sociales se hace eco del manifiesto que la Institución Humanitaria ha preparado para la conmemoración del Día Internacional del Voluntariado.
En él, se habla de que la actividad que realiza Cruz Roja, atendiendo las necesidades de las personas vulnerables en cualquier contexto, no sería posible sin la participación anónima de las personas voluntarias que forman para de la Organización.
El voluntariado actual de Cruz Roja está formado por un 61,3% de mujeres frente al 38,7% de hombres, siendo por edad la franja mayoritaria la comprendida entre los 30 y los 50 años (42%), seguida de los mayores de 50 (32%) y de los menores de 30 años (26%).
En la provincia de Toledo, Cruz Roja cuenta con 3.244 personas voluntarias, para agradecer su compromiso y dedicación, a lo largo de la semana, se van a realizar diferentes actividades en 18 localidades.