Cárnicas Dibe es una empresa dedica a la carne de caza que se sitúa en la frontera entre la comarca de Talavera y la provincia de Extremadura. El gran valor de Cárnicas Dibe reside en su equipo humano, la calidad de sus productos y la innovación. Además, en Dibe están concienciados con el compromiso social.
Desde La Voz del Tajo nos hemos puesto en contacto con Raúl Sánchez, gerente de la empresa, que nos ha contado en detalle porqué realizan acciones solidarias, “creo que va en el ADN de nuestra empresa, tratar siempre de ayudar a los más necesitados. Al final lo hacemos porque nos gusta y reconforta”.
Su último proyecto solidario ha sido viajar a Tanzania para ofrecer formación al personal del matadero de Karawue, “Fundación Barceló nos lo propuso y allá que nos fuimos”.
La Fundación Barceló dedicaba todos los años un presupuesto a países africanos, “pero se dieron cuenta que darles dinero no es la solución. Lo mejor es enseñarles y darles herramientas para que sean autosuficientes y se administren”, explica Raúl.
Al final lanzaron un proyecto que consistía en comprar 100 cerdos y repartirlos a 100 familias. “Esas familias cada vez que un cerdo cría tienen que entregar un ejemplar a la comunidad para inseminarle y volver a hacer el círculo. De tal manera que se está creando una economía que llaman ellos de comunidad”, comenta el gerente de Cárnicas Dibe y añade que “ahora esos cerdos se sacrifican y van a comenzar a comercializar la carne en el matadero”.
El matadero fue construido y financiado por Fundación Barceló, donado a Pamoja Community Connections, ONG local, que gestionará esta actividad, generando recursos para la comunidad y la región de Karawe.
“Ahora nosotros estamos ayudando a su puesta en marcha formando a los trabajadores para que puedan aprender a realizarlo solos cuando llegue el momento”. Dentro del proceso de formación, se ha trabajado en el uso de equipos de protección individual (Epis) y seguridad laboral, afilado de útiles, seguridad higiénico sanitaria, técnicas de sacrificio y eviscerado de los cerdos, limpieza de tripas para su aprovechamiento en la elaboración de embutidos y salchichas, salado y conservación de la carne…
Cabe destacar, que es el segundo proyecto solidario que emprende Cárnicas Dibe, pues en marzo de 2022 fueron a la ciudad de Chelm, en la frontera entre Ucrania y Polonia, para donar más de 22.000 kilos de alimentos no perecederos, nutrición infantil, ropa de abrigo, y medicamentos, entre otro tipo de ayuda.
Además, en los momento más duros de la pandemia la empresa cárnica realizó diversas acciones solidarias, como la donación a Cáritas Talavera de 274kg de alimentos.
Si algo destaca de Cárnicas Dibe, aparte de la gran calidad de sus productos, es su solidaridad. Raúl Sánchez ha concluido añadiendo que espera que no sea necesaria su ayuda próximamente, porque eso es sinónimo de que algo va mal, pero asegura que “siempre que sea necesario aquí estaremos dispuestos a colaborar”.