Eugenio Pino, ex subdirector de la Policía Nacional, ha sugerido que María Dolores de Cospedal, exsecretaria general del PP y expresidenta de Castilla-La Mancha, sea llamada como testigo en el juicio relacionado con el presunto espionaje al ex tesorero del partido, Luis Bárcenas, que se habría llevado a cabo en 2013 con el fin de obtener documentos vinculados al caso Gürtel.
En su documento de defensa Pino, quien se enfrenta a una petición de 15 años de prisión y 33 años de inhabilitación por parte de la Fiscalía, también ha solicitado que declaren como testigos Ignacio Cosidó, exdirector general de la Policía; Manuel Vázquez, quien era jefe de la UDEF en el momento de los hechos; y José Santiago Sánchez, que fue comisario general de la Policía Judicial.
Sin embargo, lo más destacado es la citación de Cospedal como testigo, aunque previamente había estado bajo investigación en este caso junto a su esposo, el empresario Ignacio López del Hierro. El juez finalmente los excluyó del caso, en contra de la opinión de la Fiscalía, al no encontrar indicios de una conspiración política más allá del ámbito del Ministerio.
Asimismo, se ha solicitado que Luis Bárcenas y su esposa, Rosalía Iglesias, quienes son el foco del caso por la operación de espionaje supuestamente organizada desde el Ministerio del Interior en 2013 para seguir al extesorero del PP y a su familia y obtener documentos relacionados con el caso Gürtel que pudieran implicar al partido o a sus líderes, declaren como testigos.
En su documento de defensa, Pino argumenta que ha colaborado plenamente con la investigación judicial y afirma que es inocente, sosteniendo que nunca ha participado en actividades ilícitas relacionadas con las acusaciones en su contra.
El pasado 13 de noviembre, el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón ordenó la apertura de juicio oral en el caso Kitchen, en el que se acusa al exministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y a la antigua cúpula de su departamento, de llevar a cabo el supuesto espionaje a Bárcenas.
La investigación del caso Kitchen, que forma parte del caso Villarejo, comenzó el 7 de noviembre de 2018 después de un informe de la Unidad de Asuntos Internos que analizaba la documentación encontrada en la residencia del excomisario José Manuel Villarejo, y que sugería la existencia de una operación de espionaje al ex tesorero del PP.
Después de varios años de investigación, el 29 de julio de 2021, el juez propuso llevar a juicio a Fernández Díaz, a su entonces número dos, Francisco Martínez, y a otros seis acusados, incluyendo a Eugenio Pino y al propio Villarejo, mientras que Cospedal y su esposo quedaron fuera del proceso.
En febrero de este año, la Fiscalía presentó su escrito de conclusiones provisionales, solicitando 15 años de prisión para Díaz, Martínez y Pino, y penas que varían entre 2 años y medio y 19 años para el resto de los acusados, siendo la solicitud más alta para Villarejo.