La Guardia Civil ha investigado a una persona por un supuesto delito contra los recursos naturales y el medio ambiente y a otras tres más por un supuesto delito de falsedad documental en documento público, oficial y mercantil.
La operación PACKINGWOOD se inició el pasado mes de mayo del 2023 tras hallar indicios el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación de que varias empresas podrían estar incumpliendo la Orden AAA/485/2013 del 11 de Marzo que establece el marco normativo de la Norma Internacional de Medidas Fitosanitarias nº 15(NIMF-15).
La UPRONA de la Comandancia de Toledo con el apoyo del UCOMA (Unidad Central Operativa de Medio Ambiente) e inspectores de Sanidad Vegetal del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación dieron inicio inmediatamente a las labores operativas a fin de comprobar los hechos, investigando en primera instancia al gerente de una empresa por un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente al haberse constatado deficiencias graves y muy graves relacionadas con el tratamiento fitosanitario de sus palets.
Paralelamente, se recibe una comunicación de las autoridades aduaneras de EEUU informando de la devolución de cuatro contenedores en los que se detectó plaga viva en el embalaje de madera, el mismo presentaba la marca oficial asignada a la empresa, que certifica que el embalaje ha sido tratado. Este hecho tendría relación inequívoca con las deficiencias detectadas en la empresa en su tratamiento fitosanitario.
Debido a las posibles repercusiones comerciales a nivel internacional, sumado a la posible afectación al medio ambiente, se procede a la inmediata paralización de la actividad de la empresa.
Siguiendo el hilo de la investigación, se procedió a la investigación de otras tres personas por un delito de falsedad documental en documento público, oficial y mercantil, gerentes de otras dos empresas, afincadas en las provincias de Toledo y Madrid. En las inspecciones se detectó la cesión y el uso no autorizado del sello de tratamiento fitosanitario, contraviniendo la Orden AAA/485/2013 del 11 de marzo.
Debido a este hecho, se procedió a la inmovilización de los embalajes de madera en los que se detectó el uso fraudulento del sello fitosanitario en la empresa toledana y la paralización temporal de la empresa madrileña.