En la tarde de ayer tuvo lugar un festejo goyesco homenaje a Félix López ‘El Regio’ en la Feria de San Antolín de Palencia. Se lidiaron toros de Núñez del Cuvillo para una terna compuesta por José María Manzanares, Andrés Roca Rey y Tomás Rufo, con mucha expectación entre los aficionados. Al romper el paseíllo y antes de comenzar el festejo se le entregó una placa conmemorativa a Félix López ‘El Regio’.
El primero de la tarde le tocó a Manzanares. Fue un toro noblón, que acometió con voluntad en las verónicas solventes y suaves del alicantino. Le cuajó muletazos muy templados, gustándose mucho y con paciencia para componer con la nobleza del animal. Una estocada un tanto desprendida, el público pidió la oreja, sin embargo, dejó sin premio la labor.
El segundo fue para Roca Rey con templadas verónicas de buen gusto, aprovechando su entrega y su desliz en el percal, donde varió el saludo con chicuelinas y una revolera de remate. Tras el encuentro con el caballo vino un quite de Roca Rey por saltilleras y gaoneras muy reunido. El diestro peruano lo cuajó de principio a fin en series muy rotundas y compactas. De rodillas comenzó su labor con un toro de mucha calidad de gran clase y de mucha acometividad. Un tanto defectuosa cayó la espada, pero fue efectiva y las dos orejas volaron al esportón del peruano.
El tercero fue para el torero de Pepino, Tomás Rufo. La faena de muleta fue muy inteligente, toreando para el toro hasta que tuvo que exigirlo un poco más y fue allí donde el animal no dio la dimensión que se esperaba. Hubo muletazos muy buenos, con intención y con suavidad, pero no tuvo chispa el toro para que el tendido le diese importancia. Ovación.
El cuarto toro fue para Manzanares. Un animal al que le costó tomar los engaños aunque cuando lo hacía, lo movía sin maldad alguna. Tras pasarlo por ambos pitones, abrevió con buen criterio en vista de la complejidad del astado.
El quinto, segundo del lote de Roca Rey, fue un toro más basto de hechuras, que no se empleó en los primeros tercios. Sin probaturas y con el toro sin definirse, comenzó Roca Rey su faena por estatuarios. Una faena que fue a más y que rompió en el último tramo con un toreo rotundo y con mucho poder. Tras una estocada, paseó dos orejas
Por último, llegó el sexto y con él la oreja para Rufo. Un animal muy venido a menos al que el de Pepino arrancó la oreja a base de pisar los terrenos de cercanías y sacar con sacacorchos algún muletazo de mérito. Esta vez amarró el trofeo con un contundente espadazo tras un pinchazo previo.
Más de tres cuartos de entrada. Toros de Núñez del Cuvillo, correctos de presencia.
JOSÉ MARÍA MANZANARES, ovación y silencio.
ROCA REY, dos orejas y dos orejas.
TOMÁS RUFO, ovación y oreja.