Agentes de la Policía Nacional, en colaboración con Europol y la Policía Federal Alemana, han desmantelado la logística en España de una organización criminal presuntamente dedicada al tráfico ilícito de migrantes sirios con destino España, Alemania y Noruega. Hay 19 personas detenidas, de las que seis han ingresado en prisión provisional. Estos migrantes eran ocultados en pisos de Cuenca y Toledo, entre otros lugares, de manera que en la provincia toledana se ha detenido a 14 personas y en la conquense a otras dos.
La ruta migratoria atravesaba tres continentes, Asia, África y Europa, vía aérea, marítima y terrestre, llegando a pagar cada traficado 20.000 euros. Además, la red criminal mantenía alianzas en cada país con otras organizaciones delictivas y cobraba a los migrantes por cada etapa mediante el método de la 'hawala', generando beneficios de 2,5 millones.
De este modo, después de numerosas gestiones y pesquisas, los investigadores concluyeron que el entramado desarticulado formaba parte de una extensa red criminal de estructura internacional, con organizaciones repartidas por los distintos países que conformaban el ciclo migratorio.
La ruta migratoria empleada por los traficantes discurría por Asia, África y Europa. Cada migrante debía ir pagando cada etapa a través del conocido método 'hawala', sistema financiero que actúa fuera de los cauces legales. Se calcula que cada migrante ha pagado 20.000 euros en total.
En concreto, partían del aeropuerto de Beirut en Líbano tras cruzar la frontera en Siria, hasta Egipto (4.000 euros), y desde allí cruzaban vía terrestre a Libia y Túnez hasta llegar a Argelia (3.500 euros). Desde las zonas costeras de Orán y Mostaganem se subían en embarcaciones de fibra con destino a las costas de la Península (10.000 euros).
Posteriormente eran trasladados en vehículo hasta los pisos de seguridad ubicados en Madrid, Cuenca y Toledo donde permanecían ocultos en condiciones de hacinamiento e insalubridad (250 euros semanales) hasta que les conseguían documentación para quedarse en España o continuar vía terrestre o aérea hasta Alemania o Noruega (entre 1.000 y 2.000 euros).
Contaban con la infraestructura necesaria, con siete pisos de seguridad en las provincias de Toledo y Cuenca donde alojaban y ocultaban a los migrantes sirios en condiciones de hacinamiento e insalubridad desde su entrada clandestina en España hasta su posterior salida.
También contaban con una importante flota de vehículos con los que recoger y trasladar a los migrantes sirios a lo largo del territorio nacional y como movimientos secundarios hacia otros países europeos, principalmente Alemania o Noruega.
La Policía Nacional destaca que estaban perfectamente estructurados en niveles según sus funciones específicas, planificación, transporte, control, financiación y apoyo, y mostraban un alto grado de profesionalización. Por el momento, han podido verificar 69 episodios migratorios con más de 350 traficados sirios, lo que generó unos 2,5 millones de euros de beneficio a la red criminal.
Con la colaboración de Europol y la Policía Federal Alemana, la Policía Nacional ha desarticulado la organización criminal que operaba en España con la detención de sus 19 integrantes, 14 de ellos en Toledo, dos en Cuenca, dos en Madrid y uno en Almería por pertenencia a organización criminal y favorecimiento a la inmigración ilegal. Seis de ellos permanecen en prisión provisional.
Además, se han realizado siete entradas y registros, cinco en Toledo y dos en Cuenca con la intervención de 9.840 euros en efectivo, cinco vehículos, numerosos terminales móviles y dispositivos electrónicos y diversa documentación relacionada con la investigación.