En un mundo donde el empoderamiento de la mujer y la lucha por la igualdad de género son temas cada vez más relevantes, la película de Barbie ofrece un mensaje original y llamativo sobre el empoderamiento de la mujer y el cuestionamiento de estereotipos de género. A través de su icónica figura y su conexión emocional con varias generaciones, la película ha generado una gran expectación.
La directora técnica de Clínicas Origen, red de centros de psicología y psiquiatría, Pilar Conde, explica que el marketing inteligentemente ha sabido utilizar el poder de la nostalgia y los estereotipos asociados para despertar la curiosidad y el deseo de ver la película.
“Barbie ha sido una muñeca que ha acompañado a varias generaciones y que ha generado tanto simpatía como rechazo. Pero, sin duda, a la mayoría de las personas tenemos vinculadas emociones, recuerdos de nuestra infancia, estereotipos heredados de lo que representaba, así como imágenes, colores asociados, por lo que la estrategia de marketing ha sabido utilizar las fortalezas e incluso las debilidades que la marca tiene para impactarnos y generarnos curiosidad y/o apetencia” continúa explicando Pilar Conde.
El color rosa juega un papel significativo en la película de Barbie, ya que representa un poderoso símbolo asociado con aspectos emocionales y psicológicos positivos. Culturalmente, el rosa está vinculado al afecto, la belleza, la sensibilidad, el amor, la esperanza y la dulzura, entre otros valores considerados tradicionalmente femeninos, indica Pilar Conde. En el contexto de la película, el color rosa simboliza la feminidad y la fuerza interior de Barbie, lo que le permite enfrentar desafíos y superar obstáculos. Es un recordatorio constante del poder de ser auténtica y valiente, independientemente de los estereotipos y las expectativas sociales impuestas.
El mensaje principal que se puede extraer de la película es la importancia de encontrar la identidad personal, valorarse a uno mismo y liberarse de los estereotipos sociales y culturales impuestos. La película también promueve la aceptación del cuerpo y la autoestima, fomentando el amor propio independientemente de las expectativas de la sociedad y las proyecciones externas. Pilar Conde recalca también que Barbie transmite un mensaje sobre el papel de la mujer en la sociedad, enfatizando la igualdad de género y la importancia de reconocer la individualidad de cada persona sin importar el género.
El personaje de Ken representa al hombre en un matriarcado y destaca la dificultad de las mujeres en un patriarcado. También aborda los roles rígidos impuestos a los hombres y cómo esto puede afectar su identidad. En este sentido, la película busca explorar la complejidad de los personajes y los desafíos que enfrentan en el contexto de un mundo cambiante. Esta nueva visión de cambio de roles puede generar diferentes reacciones en el espectador, tanto masculino como femenino. Algunos hombres y mujeres podrían reaccionar con críticas si tienen creencias machistas arraigadas, mientras que otros podrían encontrar en la película un mensaje positivo y de reflexión sobre la igualdad de género, concluye Pilar Conde.