Por segundo año consecutivo, los vecinos Valdetorres de Jarama (Madrid) han denunciado la dramática situación en la que se encuentran los corzos de la zona en plena ola de calor. Una valla, que alcanza un perímetro de 221 hectáreas, les impide acceder libremente al río para beber. Las reacciones no se han hecho esperar y las redes sociales han servido como altavoz de la denuncia.
Alicia Negrón, @Alicia82mad en Twitter, ha publicadoa través de sus redes sociales un hilo en el que se muestra como estos animales “agonizan de calor intentando cruzar al agua”, al dejarles sin acceso al río Jarama.
La valla perimetral impide el movimiento de los corzos y otros animales, que se quedan enganchados en los alambres o no pueden acceder al río Jarama para beber agua. Algunos animales, especialmente los corzos, resultan gravemente heridos al intentar saltar o atravesar la valla, ya que para ellos resulta casi invisible.
“También han visto madres con crías que por el calor y el agotamiento no pueden acceder al agua en plena ola de calor por segundo año. Esto ya es maltrato animal reincidente. Los corzos caminan sin parar por la valla que linda el río Jarama en Madrid. La empresa valló también la zona del cauce del río a lo largo de varios kilómetros sin dejarla libre a animales y naturaleza. Otro año más de tortura”, ha aseverado Alicia a través de twitter.
Además, según informa TeleMadrid, los vecinos han denunciado que la empresa ha vallado, no solo el espacio de la plantación de pistachos, sino una superficie casi tres veces superior, dejando dentro del perímetro a muchos animales que se encuentran atrapados., Son los propios vecinos los que están acercando cubos y palanganas de agua para que logren sobrevivir estos animales debido, especialmente en estos días de temperaturas tan elevadas.
Esta plantación se sitúa en una zona de gran valor ecológico, en el espacio fluvial y dentro de un espacio protegido Red Natura 2000.
Una situación complicada que se repite para estos animales otro verano. Sin embargo, la Comunidad de Madrid ya sancionó a la empresa en enero de este mismo año. “Para realizar una plantación de pistachos arrasó la vegetación del soto de ribera e instaló un vallado en espacios públicos”.
Así lo informaron en nota de prensa los colectivos ARBA, Asociación Ecologista del Jarama El Soto, Ecologistas en Acción Madrid, GRAMA y Jarama Vivo, que denunciaron estas actuaciones en marzo de 2022.
La empresa, tal y como se concluyó el enero de 2023, debería pagar 2800 euros —a la legalización de las actuaciones— así como proceder al retranqueo del cerramiento y a realizar medidas de restauración y compensación.