La Policía Nacional ha detenido a dos varones, de 41 y 36 años de edad, que se presentaron en varias ocasiones en una vivienda del barrio de Azucaica, en Toledo, en la que hurtaron varios objetos de valor haciéndose pasar por agentes medioambientales.
La víctima recibió en su domicilio la visita de dos personas -un varón y una mujer- que vestían un mono de trabajo y se identificaron como agentes medioambientales. Estas personas le indicaron que su labor era el tratamiento de plagas y que debían recoger una serie de muestras en la vivienda. Tras inspeccionar la planta baja, dieron por finalizada su tarea y fijaron una nueva cita para el día siguiente.
En su segunda visita se presentaron dos hombres, uno de ellos el mismo que ya había acudido el día anterior, y le indicaron que debían revisar la planta de arriba. Tras la revisión le dijeron que había que fumigar ciertas habitaciones, bajo sanción de 2.500 euros, por lo que regresarían días después.
Tras esta segunda visita echó en falta varios objetos de cierto valor, por lo que comunicó la situación a un familiar, quedando éste en estar presente en la siguiente visita. Ambos realizaron una revisión más detallada de la vivienda, echando en falta aún más objetos, por lo que comunicaron con el teléfono 091, acudiendo al lugar varios agentes que les indicaron los pasos a seguir.
Cuando los estafadores acudieron al domicilio por tercera vez, la víctima les pidió que se identificasen plenamente, a lo que estas personas respondieron con amenazas, marchándose del lugar a toda prisa. Los policías, que ya estaban sobre aviso, interceptaron el autobús en el que subieron para intentar huir y localizaron a los presuntos estafadores, ambos con numerosos antecedentes por delitos contra el patrimonio.
En el registro de sus pertenencias se hallaron, dentro de sus mochilas, vestimenta de trabajo de color verde, una placa identificativa y material para fumigar.
Los dos detenidos tendrán que responder como presuntos autores de un delito de usurpación de funciones públicas, y el de mayor edad además, como presunto autor de un delito de hurto. La investigación continúa abierta para averiguar la identidad de la mujer que estuvo presente en la primera visita, así como el destino de los efectos sustraídos.
Ante casos como este o similares como los que se dan con falsos revisores de suministros, tenga en cuenta que por regla general las revisiones suelen darse cuando se comunica una incidencia o se solicita y se acuerda previamente. Desconfíe si se personan en su vivienda de improviso sin que haya solicitado previamente el servicio.
Si cree que puede tratarse de una intervención de emergencia debido a una avería, pídale a las personas que se identifiquen y manténgales a la espera a la puerta de casa mientras realizan la comprobación con la compañía de la que dicen proceder, que será quien confirme si realmente son técnicos.
En caso de duda, contacte con la Policía Nacional en el 091. Si es necesario, una patrulla acudirá a su domicilio para identificar a estas personas y comprobará si su presencia allí está justificada.