Agentes de la Policía Nacional han desarticulado un grupo criminal formado por cinco conocidos aluniceros especializados en robos con fuerza de naves industriales y camiones a través usando vehículos de gran cilindrada previamente sustraídos a los que cambiaban las placas de matrícula para dificultar la acción policial. Se trata de un grupo altamente activo que operaba no solo en la Comunidad de Madrid sino que se desplazaba a otros puntos del país como Toledo y Valencia para cometer sus asaltos.
Se les imputa un total de 50 hechos delictivos tales como robos con fuerza en empresas, robos de turismos y camiones con su mercancía, daños y falsedad documental, ha informado este jueves la Jefatura Superior de la Policía de Madrid.
La investigación se inició el pasado mes de octubre a raíz de un robo en una empresa de paquetería de la localidad madrileña de Torrejón de Ardoz cuando los trabajadores estaban en el interior realizando su actividad laboral.
Estos individuos utilizaron cinco vehículos robados de alta gama y gran cilindrada para acceder al interior de las instalaciones forzando la puerta del muelle de carga para sustraer teléfonos móviles de marcas de prestigio valorados en más de 1,3 millones de euros.
Una vez logrado el botín, abandonaron rápidamente el lugar incendiando los vehículos utilizados tanto en las proximidades como en el municipio de Getafe.
Avanzadas las pesquisas, los agentes pudieron comprobar como estos individuos adoptaban numerosas medidas de seguridad, como utilizar vehículos de alquiler a nombre de terceros cambiándolos además constantemente, pernoctar en distintos domicilios o identificarse con documentación falsa.
Una vez lograron identificar a los cinco presuntos varones que formaban parte de este grupo criminal, se estableció un dispositivo para su localización logrando la detención de todos ellos en los últimos días.
Los agentes realizaron registros en dos fincas de los municipios madrileños de Rivas-Vaciamadrid y Aranjuez, donde encontraron mercancía y vehículos sustraídos así como dinero en efectivo.
Además los investigadores también incautaron numeroso material como grupos oxicorte para violentar las cajas fuertes e inhibidores de frecuencia y otros útiles para cometer los robos.
En total, se les imputan 50 hechos delictivos entre los que destacan pertenencia a grupo criminal, robos con fuerza, robos de turismos, de camiones y remolques con mercancía, falsedad documental y daños.
Los agentes pudieron constatar que el valor de lo sustraído supera los tres millones de euros sin contar el importe de los propios turismos y camiones. Actualmente la investigación continúa abierta puesto que no se descarta que se produzcan nuevos arrestos.