Efectivos del equipo territorial de Policía Judicial de Albacete, en el marco de la operación 'Uniata', han detenido a cinco varones, de entre 20 y 30 años de edad, de nacionalidades española y ecuatoriana, como presuntos autores de 24 delitos de robo con fuerza en las cosas, principalmente en lugares de culto, farmacias, estaciones de servicio y otros establecimientos públicos, además de otro de pertenencia a grupo criminal.
Según ha informado en nota de prensa el instituto armado, los detenidos ya contaban con antecedentes recientes por hechos de similares características a los investigados en esta operación. Las investigaciones se iniciaron el pasado mes de febrero, cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de la comisión de varios robos en la sierra de Alcaraz, todos ellos cometidos en establecimientos públicos, entre ellos, iglesias, farmacias, gasolineras, bares y hasta en un ayuntamiento.
Tras el análisis pormenorizado de estos ilícitos penales, a través de las inspecciones oculares y otro tipo de gestiones, los guardias civiles encargados de las investigaciones pudieron observar un idéntico 'modus operandi', coincidiendo en todos ellos varios indicios que hacía pensar que se trataba de los mismos autores, especializados, principalmente, en el robo de iglesias y farmacias. En los robos a los lugares de culto, los detenidos sustraían las joyas que portaban las imágenes religiosas, así como el dinero existente en los limosneros. En las farmacias, que previamente violentaban, se apoderaban del dinero existente en las cajas registradoras.
Durante los meses que ha durado la investigación, la Benemérita ha conseguido identificar a todas las personas que formaban parte del grupo criminal desmantelado, asentadas en la provincia de Murcia, desde donde se desplazaban a las provincias limítrofes como la de Albacete, Granada o Alicante e incluso en la murciana, donde cometían los robos ahora esclarecidos.
El grupo criminal tenía una gran movilidad geográfica, no dudando en recorrer cientos de kilómetros en una sola noche como se pudo comprobar con la detención de cuatro de sus cinco integrantes en Murcia, cuando estos regresaban de la provincia de Granada, donde en distintas poblaciones granadinas cometieron el robo en una iglesia, otro intentado en otro templo, un tercero en una farmacia y el robo de un vehículo. En el momento de realizar estas detenciones se les intervinieron joyas, dinero en efectivo, teléfonos móviles, además del vehículo en el que viajaban, que resultó intervenido.
Los detenidos se habían especializado en los robos a iglesias y farmacias, estudiadas previamente, donde tras fracturar las cerraduras de las puertas principales de los inmuebles, accedían a su interior; sustrayendo en pocos minutos todas las joyas y dinero posible, localizadas en las imágenes religiosas, limosneros y cajas registradoras. El grupo delictivo desmantelado, que actuaba de forma muy activa, utilizaba para sus movimientos vehículos que sustraían previamente en las proximidades de los lugares donde actuaban, donde lo hacían vestidos con ropa deportiva y con gorros en la cabeza que ocultaban su rostro, evitando su rápida identificación.
Los integrantes del grupo delictivo eran perfectamente conocedores de las zonas donde actuaban y, mientras los tres principales miembros planificaban y ejecutaban directamente los robos, cometidos generalmente en horario nocturno, seleccionando previamente los objetivos, el resto realizaba labores menores, como las de vigilancia y protección, extremando las medidas de seguridad con el fin de no ser descubiertos.
Durante la explotación de la operación 'Uniata', se practicaron tres registros en las localidades de Los Garres-Murcia y Lorquí, también provincia de Murcia, donde se intervinieron diversas joyas, procedentes de los robos en iglesias; 5.200 euros en efectivo, en billetes y monedas de distinto valor; varios teléfonos móviles; prendas de vestir y numerosa herramienta, alguna de ella utilizada en los robos. La Guardia Civil también se incautó de un turismo propiedad de uno de los detenidos y otro sustraído en el garaje de una iglesia granadina, que ya se encuentra en poder de su legítimo propietario.
Con la operación 'Uniata', la Guardia Civil ha conseguido esclarecer un total de 24 hechos delictivos, 12 en la provincia de Albacete, 6 en la de Alicante, otros 2 en la de Murcia y 4 en la de Granada.
Durante la fase final de la operación 'Uniata', el equipo Territorial de Policía Judicial de Albacete contó con el apoyo de efectivos de otras unidades de la Comandancia albaceteña como de la Unidad Orgánica de Policía Judicial y la Unidad de Seguridad Ciudadana (USECIC), además de esta misma unidad de la Guardia Civil de Murcia.
Las diligencias policiales, instruidas por el Equipo de Policía Judicial de Albacete, fueron entregadas, junto con los detenidos, en el Juzgado de Instrucción Número 1 de Murcia, en funciones de guardia, decretando el ingreso en prisión de los tres principales integrantes del grupo investigado.