Ayer, 8 de junio, día del Corpus, tuvo lugar una corrida de toros en Toledo, en la que torearon grandes figuras como El Juli, Roca Rey y Tomás Rufo.
Abrió la tarde un toro cuajado de Alcurrucén, que mostró su buena clase. Capacidad de El Juli, maestría en toques y alturas en una faena en la que los mejores muletazos llegaron sobre la diestra. Emborronó con el acero una actuación merecedora de premio. Silencio.
Roca Rey cuajó una tarde rotunda. El peruano dejó su sello en dos faenas de sumo poder, pisando con autoridad los terrenos de cercanías. Incluso, cobró su rédito con dos fuertes volteretas, que le obligaron pasar por la enfermería sin poder salir en hombros. El peruano armó un auténtico lío al segundo, al que ya recibió con templadas verónicas y calentó el ambiente en el quite posterior. Comenzó el peruano por estatuarios muy ajustados, sufriendo una voltereta al intentar cambiarse el viaje del astado por la espalda. La respuesta: cuatro nuevos cambiados por la espalda ligados todos ellos que pusieron al público en pie. Fue éste un gran toro de la familia Lozano, con humillación, clase, queriendo todo por abajo. Enorme Roca Rey en varias tandas sobre la diestra de absoluto dominio, con la mano baja. Bajó el toro al natural, pero se dejó Roca Rey llegar los pitones a la banda de la taleguilla en el final. Inconmensurable. Auténtico lío. Sin embargo, la espada no entró hasta el tercer intento y todo quedó en una gran ovación. Ovación tras aviso.
El tercero tuvo clase, pero estuvo muy justo de fuelle. De uno en uno fue Tomás Rufo cuajando una faena de muletazos de gran trazo y dulzura. Siempre muy encajado, para intentar alargar las embestidas del astado. Un pinchazo previo a la estocada le impidió pasear una oreja. El público se la pidió, pero el presidente no lo vio oportuno. Ovación.
Pocas opciones tuvo El Juli con un cuarto que se vino pronto a menos. Le costó mucho al astado repetir, por lo que la ligazón fue muy difícil a pesar de la actitud de El Juli. También la conexión con los tendidos. Palmas.
Roca Rey se impuso a la embestida del quinto, que no tuvo mucho ritmo. Confió mucho, apostando en el momento del embroque, para tirar muy rotundo de la embestida. Se metió en los terrenos de cercanías, donde sufrió una espectacular voltereta. Volvió al mismo sitio para volver a poner en pie Toledo. Dejó una estocada y paseó las dos orejas.
El sexto fue un toro que tuvo buena clase, aunque se vino pronto a menos y le costó repetir sus embestidas. Buena faena de Tomás Rufo, que siempre tiró de las embestidas por abajo. Como manejó la espada con habilidad, paseó una oreja.
Cabe señalar que Tomás Rufo ocupará este viernes en Granada el lugar del todavía convaleciente Sebastián Castella, herido en su última comparecencia en la Feria de San Isidro de Madrid. De este modo, el toledano completará un cartel encabezado por El Juli y Roca Rey. La terna estoqueará una corrida de toros de Juan Pedro Domecq.
Tradicional festejo del Corpus en la plaza de toros de Toledo. Lleno. Toros de Alcurrucén, de buenas hechuras, muy en la línea de Rincón, de noble juego, aunque algo faltos de motor. Destacó el gran segundo.
El Juli: silencio, palmas.
Roca Rey: ovación tras aviso, dos orejas.
Tomás Rufo: ovación, oreja.
Al finalizar el paseíllo, sonaron los acordes del Himno Nacional de España. El banderillero Antonio Chacón saludó una ovación tras parear de manera espectacular al segundo. Se desmonteraron los banderilleros Andrés Revuelta y Fernando Sánchez en el sexto.