El presidente de Castilla-La Mancha y candidato del PSOE a la reelección, Emiliano García-Page, ha arrancado la semana en la que dará inicio la campaña electoral con una entrevista en 'El programada de Ana Rosa', en Tele 5, en la que ha aprovechado para acentuar su perfil propio como líder del Ejecutivo castellano-manchego al margen del PSOE a nivel nacional, defendiendo que siempre ha sido "coherente" y que no ha cambiado "ni de principios ni de valores" desde que entró en política.
En la entrevista, recogida por Europa Press, ha bromeado zanjando que no sólo es un "verso suelto" en algunas ocasiones y con algunos debates, sino que llega a ser "un soneto entero".
"Tengan en cuenta que la mayoría de mis opiniones son reacciones a cosas que pasan que creo que perjudican los intereses de mis ciudadanos. Me opuse al referéndum en Cataluña no porque no puedan pedirlo, sino porque nosotros --los castellanomanchegos--, como españoles, tenemos derecho a opinar"; ha dicho como ejemplo de su teoría.
Así, abunda en que sus opiniones "no son de oficio", y en todo caso nunca improvisa "conceptos". "Puedo mirar hacia atrás y siento coherencia. No he cambiado nada de lo que he dicho desde hace años".
García-Page ha vuelto a confirmar que en el caso de no poder formar gobierno se quedaría como líder de la oposición en Castilla-La Mancha.
De otro lado, ha dejado claro que aunque líderes nacionales vengan a la Comunidad Autónoma, la campaña "tiene que ser autonómica y local". "Si Pedro Sánchez quiere venir, no hay problema. Hay un acto previsto. Pero los que vengan de Madrid, que vengan dando, y no golpes", ha avisado.
Preguntado por las encuestas de las últimas semanas, ha dicho que en todo caso le auguran mejor resultado que las encuestas que precedieron a otros procesos electorales.
Eso sí, les ha restado importancia, sobre todo porque en algunos casos una buena encuesta cuesta entre 10 y 14 euros por encuestado, y algunos medios de comunicación casi "ni llegan a fin de mes" pese a que ofrezcan este tipo de sondeos "de fogueo".
"Si a algunos les cobraran por quedarse a cuatro puntos de la realidad -en sus vaticinios-..." ha insinuado García-Page, quien al hilo de su argumento ha dicho que no le importa que el PP "se sienta a gusto" con los sondeos que le dan un gobierno apoyado por Vox mientras de otro lado él gane "en el mundo real".
García-Page ha sido preguntado por el tono de promesas electorales de los últimos días de Pedro Sánchez, indicando que "no hay que criminalizar ideas" y siempre es preferible un discurso propositivo antes de las elecciones que los "insultos".
Sobre la propuesta de Podemos de poner en marcha supermercados públicos, ha rememorado cómo Pablo Iglesias llegó a presumir de comprar en Alcampo. "Está fuera de la realidad. Si en vez de decirlo yo se lo preguntara a mi hijo, le diría que es una bobada supina".
También ha sido preguntado por la ley de Agricultura Familiar aprobada en Castilla-La Mancha, indicando que incluso los sindicatos ya han replicado al argumentario del Partido Popular desmintiendo que se vayan a expropiar tierras.