El consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero, ha asegurado que "todo indica" que el incendio forestal que afecta a la localidad de Ocentejo (Guadalajara) desde la tarde de este martes fue causado por "un descuido humano".
Así lo ha señalado a preguntas de los medios este miércoles. "No me quiero aventurar pero todo indica a que en el propio casco urbano de Ocentejo ha tenido origen por un descuido humano", ha comentado, por lo que ha aprovechado para volver a reiterar la petición a la ciudadanía de "extremar la precaución", porque "cualquier descuido nos puede causar un incendio".
A pesar de ello, se ha mostrado "optimista" por la evolución del fuego, que ha calcinado 226 hectáreas, apuntando que el trabajo realizado desde este martes por la tarde y que ha continuado durante la noche permite pensar que el incendio será estabilizado "en las próximas horas".
Sin dejar de ser "prudente", Escudero ha explicado que por la orografía "muy compleja" del terreno, situado en las inmediaciones del Parque Natural del Alto Tajo, así como por las altas temperaturas, las bajas precipitaciones y las rachas de viento, el fuego "podría haber arrasado muchas más hectáreas".
Es por ello que ha querido agradecer su trabajo al personal de Plan Infocam y a los medios enviados al incendio tanto por parte del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico como por los gobiernos de Comunidad Valenciana y Aragón.
De igual modo, el consejero ha detallado que las 226 hectáreas quemadas son zonas especialmente de pinar, por lo que ha celebrado que no haya que lamentar la quema de zonas pobladas por especies como la sabina.
Por otra parte, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha avanzado este miércoles durante un desayuno informativo que su Ejecutivo va a tomar la decisión en Consejo de Gobierno de adelantar al próximo martes la prohibición de realizar fuegos en espacios públicos y de monte para evitar posibles incendios.
Sobre esto también se ha pronunciado Escudero, que ha indicado que todo el mundo es "consciente de que las temperaturas y el estrés hídrico" actual "son más propias de junio o julio", lo que ha motivado también a movilizar desde mitad de marzo a todo el dispositivo contra incendios.
"El sentido común indica que, como no van a cambiar las temperaturas y las precipitaciones, habrá que tomar medidas que restrinjan el uso del fuego", ha manifestado.