han convocado una manifestación aprovechando la celebración esta semana del Día Mundial del Agua. Los más de 700 manifestantes han mostrado su rechazo a la situación por la que atraviesan los ríos de la cuenca del Tajo.
La situación es especialmente preocupante en los ríos madrileños y en el eje del río Tajo. Los ecosistemas fluviales se han convertido en cauces sin apenas vida sin que las administraciones responsables de la conservación de los ríos estén actuando. Este desprecio por el valor de estos importantes ecosistemas y las oportunidades que podrían ofrecer a las localidades ribereñas resulta inaceptable para los convocantes.
El manifiesto suscrito por medio centenar de organizaciones, se ha leído en la plaza de Zocodover por representantes de los municipios ribereños de Aranjuez, Toledo y Talavera de la Reina.
En este manifiesto han reprochado a las administraciones públicas responsables (Confederación Hidrográfica del Tajo, Comunidad de Madrid, Junta de Castilla-La Mancha, Canal de Isabel II) su “inaceptable inhibición” ante la degradación de los ríos de la cuenca. Seguidamente se ha señalado, entre los principales problemas que padecen los ecosistemas fluviales, a la falta de caudales suficientes, los trasvases, la sobreexplotación del regadío, la falta de depuración de las aguas residuales urbanas, la ocupación de las riberas o las especies exóticas invasoras. Previo a la lectura del manifiesto, han intervenido varios poetas y cantantes locales de Toledo.
La manifestación ha discurrido con un ambiente festivo por las calles de Toledo, amenizada por la batukada Kekumka y seguida de distintas pancartas que mostraban los problemas que padecen los distintos ríos de la cuenca del Tajo (Jarama, Guadarrama, Henares, Manzanares o el propio Tajo, entre otros). Hay que destacar la presencia de una delegación de colectivos portugueses que se han desplazado hasta la capital toledana.
La protesta ha terminado en el puente de Alcántara, sobre las aguas del Tajo. Allí se ha desplegado una gran pancarta de 48 metros cuadrados con la leyenda “Queremos ríos vivos con agua para la vida”. A continuación, se ha soltado agua limpia desde varios cubos (con la leyenda “Tajo Vivo”) escenificando la falta de agua limpia y en cantidad que necesita el río Tajo.
Con el deseo de que sus principales afluentes madrileños le tributen al Tajo el buen estado ecológico que la Directiva Marco del Agua exige, también se ha soltado agua limpia procedente de varias botellas de agua de las que se descolgaba el nombre de cada uno de ellos: Jarama, Guadarrama, Henares y Lozoya.
Bajo el lema “Queremos ríos vivos con agua para la vida” es el segundo año que, la Plataforma por los ríos madrileños y el río Tajo, junta a decenas de colectivos movilizados en la semana de celebración del Día Mundial del Agua.
El año pasado una manifestación similar marchó por las calles madrileñas entre la sede de la Confederación Hidrográfica del Tajo hasta el río Manzanares. Disfrutar de los ríos en buen estado es un derecho ciudadano y una obligación legal, que se seguirá exigiendo a las administraciones públicas. Aún se está a tiempo de conseguir que los ríos de la cuenca del Tajo sean ríos vivos con agua para la vida, recuperando sus funciones ambientales, culturales y sociales.