La Respetable Logia Ceres, con el número 107 de la GSLE, levantó columnas el pasado día 21 de enero en el oriente de Talavera de la Reina.
La ceremonia contó con el respaldo de Xavi Molina, SGM, que asistió a su VM, simbólico Perdurabo, durante el acto. La logia Ceres es la primera que trabaja en el oriente de Talavera desde la II República. "Nos llena de orgullo poder recuperar el trabajo masónico de una obediencia adogmática y mixta en esta ciudad de Castilla La Mancha", manifestó el SGM.
Desde la GLSE, asimismo, han destacado el "gran trabajo previo de muchos hermanos y hermanas que han facilitado esta recuperación". La RL Ceres trabaja regularmente en el Rito Escocés Antiguo y Aceptado. Tiene sus puertas abiertas a cualquier hermano o hermana que desee trabajar en Libertad, Igualdad y Fraternidad.
Con esta incorporación también se refuerza a la Gran Logia Simbólica Española y a su Distrito Centro, que suma más de 60 logias activas y casi 1.000 miembros en el conjunto del territorio del estado.
La Gran Logia Simbólica Española (GLSE) es la principal organización masónica mixta y adogmática de España. La Gran Logia considera que la creencia en una verdad revelada es una libertad del individuo, que puede creer o no creer. La GLSE no hace distinción de género, raza o credo. Cualquier librepensador puede iniciarse y desarrollar su vida masónica en plena igualdad de derechos y obligaciones.
La Gran Logia es iniciática y simbólica, parte fundamental del método masónico, que busca el crecimiento de la persona por medio del trabajo simbólico, siendo su objetivo que dicho trabajo reporte en el bien de la humanidad. “Trabajamos tanto hacia los individuos como hacia la sociedad, en la incansable búsqueda del perfeccionamiento. Tenemos como principios la tolerancia mutua, el respeto a los demás y a uno mismo, y la absoluta libertad de conciencia”.
La GLSE nunca adopta posicionamientos políticos o religiosos; “deseamos que en el seno de nuestra organización masónica exista la mayor pluralidad de opiniones, con el objetivo de facilitar su debate y discusión, en la diversidad y respeto. Nuestra divisa es libertad, igualdad y fraternidad”.
La Gran Logia Simbólica Española está presente en la mayoría de las capitales del estado. Son reconocidos como Obediencia masónica por las grandes organizaciones liberales de Europa y de otros continentes. Además, participan activamente en diversos foros internacionales y buscan activamente difundir el conocimiento que adquieren con su trabajo.
La Logia es la base de cualquier organización masónica. Es la unidad básica de la Francmasonería. Para constituirse requiere un mínimo de siete Hermanos, tres de los cuales han de ser Maestros. No hay un máximo de miembros establecido; entre quince y cincuenta aseguran la estabilidad y el buen funcionamiento de una Logia o Taller. Cada Logia es soberana y tiene amplio poder de decisión sobre sus propios asuntos y modos de trabajo.
Esta libertad explica la gran variedad de puntos de vista y concepciones diversas que pueden observarse en la Masonería, siempre dentro de los ideales comunes de Libertad, Igualdad y Fraternidad, expresados principalmente a través del estímulo del libre pensamiento de sus miembros, la tolerancia, la defensa de la democracia, el laicismo, el rechazo de todo dogmatismo y la defensa a ultranza de los Derechos Humanos.
Si bien la Masonería es universal, las Logias se federan según los países en que trabajan, respetando la legalidad vigente en cada uno de ellos. Estas federaciones se llaman Grandes Logias u Obediencias. Se reúnen una vez al año en una Gran Asamblea a la que acuden los delegados de las Logias (con un criterio de estricta proporcionalidad democrática), para elegir a sus autoridades, reformar o reafirmar los reglamentos y abordar los temas y proyectos que les son comunes.
El órgano ejecutivo de la Gran Logia Simbólica Española es el Gran Consejo Simbólico, formado por el Gran Maestre y 20 miembros (Grandes Consejeros). La elección del Gran Maestre se realiza por sufragio universal entre todas las Logias de la Gran Logia Simbólica Española.
La elección de los Grandes Consejeros se inicia en las Logias, donde se eligen en función del número de miembros que las componen; posteriormente, en otro Congreso, de Distrito, son elegidos los Grandes Consejeros entre los propuestos por las Logias que forman el Distrito para, más tarde, ser propuestos a la Asamblea General.
El órgano legislativo de la Gran Logia Simbólica Española es la Asamblea General, que se reúne por lo menos una vez al año. Todas las logias están representadas en la misma a través de sus Diputados, representantes elegidos a tal efecto por las logias. Previamente a la celebración de la Asamblea se elige entre los Diputados al Presidente, que es instalado por el Gran Maestre; posteriormente son elegidos los oficiales de la Asamblea.
La Asamblea General ejerce el poder constituyente y legislativo de la Gran Logia Simbólica Española. Estudia y se pronuncia sobre la gestión del Gran Consejo. Aprueba el ejercicio económico del año anterior, así como el presupuesto del siguiente año. Ratifica los nombramientos de los Grandes Consejeros elegidos en los Congresos de Distrito o las Logias no adscritas a Distrito, y les toma juramento. Elige a los Maestros Jurados de la Alta Cámara de Justicia (órgano judicial) y a los Miembros de la Comisión de Solidaridad Masónica. Recibe el juramento o promesa del Gran Maestre, elegido por sufragio universal en todas las logias de la Gran Logia Simbólica Española.