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La contaminación sigue atacando al río Jarama, afluente del Tajo

IMPACTANTE

Hace menos de un mes se instalaron diez redes de captación de residuos y ya están llenas

Redacción La Voz del Tajo | Sábado 08 de octubre de 2022

Desde hace varios meses latas, papeles, bolsas, preservativos, compresas... son algunos de los residuos que se pueden encontrar en el río Jarama a su paso por el corredor del Henares. El afluente del Tajo acumula toneladas de basura y contaminación, que acaban derivando en otros ríos como el Tajo.

Ante esta realidad y para intentar frenar dicha contaminación, el proyecto Limpia Ríos Salva Océanos, con la colaboración del ayuntamiento de Coslada, identificó los puntos negros desde los que se realizan este tipo de vertidos al río y proyectó la instalación de cestas de captación, unos elementos que dejan pasar el agua, pero atrapan los residuos sólidos de tamaño mediano y pequeño.

Un total de 3,5 toneladas de residuos higiénicos, fundamentalmente toallitas húmedas, es la cifra que voluntarios y voluntarias han retirado de la ribera del río Jarama dentro del proyecto LRSO de Biotherm y Fundación Ecoalf con la colaboración del Proyecto LIBERA de SEO/BirdLife en alianza con Ecoembes.

Este tipo de residuos suponen un 30% del total de residuos retirados y caracterizados por los participantes en las actividades de recogida. En las orillas del Jarama se acumulan bastoncillos, toallitas, compresas, salvaslips o tampones. Todos estos residuos que se desechan incorrectamente por el WC son perjudiciales para el medio ambiente y nuestra salud.

En total se han instalado 10 redes de captación, 8 con una capacidad de hasta 300 kg cada una y 2 con una capacidad de hasta 500 kg cada una. Una vez llenas, se recambiarán por otras vacías. Por tanto, el sistema tiene la capacidad de retener hasta 3,4 toneladas por recambio de redes, lo que, al año, va a vitar que lleguen al río unas 17 toneladas de toallitas. Además, para conocer mejor el tipo de residuo higiénico, se analizarán los componentes de las cestas una vez llenas, pudiendo llamar la atención a la ciudadanía sobre el uso de ciertos productos.

Lo más sorprendente es que tan solo un mes más tarde de su instalación las redes ya están llenas. La impactante imágen muestra la cantidad de residuos que acaban en el río y sino fuera por las redes de captación hubiesen acabado en el Jarama y el Tajo.

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