El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha arrancado el último Debate sobre el Estado de la Región de la legislatura asegurando que desgranará a lo largo de las próximas horas desde la tribuna de oradores cerca de 200 anuncios, "todos ellos en positivo"; y recordando a la oposición representada por el Partido Popular que sus anuncios suelen ir en la línea de "abrir hospitales" y no de "cerrarlos".
A las 11.08 horas de este martes, el líder del Ejecutivo autonómico, tras saludar a los asistentes en la tribuna del Convento de San Gil, ha dicho además que prefiere centrar la intervención en lo que pase a futuro y no en hacer balance de lo ya realizado, que ha sido "mucho".
En este primer tramo de intervención, además de confirmar que va a cumplir su programa de investidura "a pesar de la crisis encontrada y del enorme agujero de los recortes" de su antecesora en el cargo, María Dolores de Cospedal, ha avanzado que "cuando termine esta legislatura habremos hecho dos programas y medio". "El que prometimos, el que reclamaban las emergencias, y el que será determinante para salir del bache. Vamos a cumplir", ha aseverado.
También ha querido hacer alusión a la celebración del Día de la Policía Nacional --llevaba un pin alusivo al Cuerpo-- haciendo extensiva la felicitación también a los agentes forestales por el Día de su patrón, San Francisco de Asís.
Este año, ha agregado, "hay que estar especialmente orgullosos de cómo combatimos los incendios y de cómo preservamos el medio forestal".
A pesar de tener mayoría amplia, "ha firmado más acuerdos en dos legislaturas que ninguno en la historia", y todo ello "de la mano de empresarios, sindicatos, de universidades o de organizaciones agrarias".
Para García-Page hay "muchas formas de gestionar las crisis", y aludiendo a la que afectó a todo el mundo a partir de 2007, ha recordado que esa fue precisamente la circunstancia que hizo que el Partido Popular arrebatara el Gobierno al PSOE en Castilla-La Mancha por primera vez.
En esas distintas formas de abordar las crisis, ha diferenciado entre hacerlo "con alma o sin alma; pensando en los que más o pensando en los que menos la padecen", y esa es la diferencia entre PP y PSOE.
Ha sido aquí donde se ha preguntado qué pasaría si "todo se complica" o si la situación internacional con el trasfondo de la guerra en Ucrania se agudiza, opinando que "la gente va a tener claro quién lo abordará con la intención de aminorar el efecto en la brecha social o quién quiere interpretar la salida de la crisis solo por los que salen primero de la crisis".
Así, es importante que la gente tenga claro "quién recorta, quién no recorta; quién despide, quién no despide; quién ayuda, o quién baja impuestos a los que más tienen".
En ese sentido, ha avanzado, el debate "va a ser interesante", sobre todo después de la visita del presidente del PP castellanomanchego, Paco Núñez, al presidente andaluz, Juanma Moreno.
En este punto, ha hablado de autonomía política dentro del organigrama de un partido, y se ha erigido como "autónomo" del PSOE y fiel al "encargo de los ciudadanos, el de defender por encima de todo los intereses de Castilla-La Mancha".
Una autonomía que según ha deslizado veladamente no ejerce Paco Núñez con respecto a su partido. Como ejemplos, ha hecho alusión a la postura del PP castellanomanchego en cuanto a asuntos como la instalación del Almacén Temporal Centralizado de residuos nucleares en Cuenca; o la posición en defensa del trasvase Tajo-Segura, premisas que desde Génova prevalecen en Paco Núñez, según ha dado a entender García-Page.
Ha proseguido defendiendo su autonomía apelando a su "firmeza" para defender lo que la ciudadanía le ha encargado, "los intereses de Castilla-La Mancha"; y eso a pesar de que se lleva "muchos golpes" por defender "la idea de España y la Constitución".
"Me llevo muchos golpes, y de los míos más. Pero no voy a cambiar. Voy a seguir así. Es lo mínimo que se merece una región que cumple ahora 40 años de Estatuto de Autonomía", ha afirmado Emiliano García-Page.
Tras los últimos 40 años de historia, ha recordado, hay ahora 400.000 habitantes más mientras otras regiones han perdido; se han ganado siete años de esperanza de vida; y la economía de la región "no solo se ha multiplicado por diez en los últimos 40 años, sino que se ha duplicado desde el año 2000".
"Exportamos 100 veces más, tenemos una enorme proyección exterior que significa el 40% de toda nuestra riqueza, datos rotundos para aquellos cenizos que quieran denostar lo que significa haber usado el motor de la aceleración española y el turbo de la autonómica", ha abundado.
El mayor gasto sanitario por paciente, triplicar el gasto medio por alumno desde que se gestiona la educación, o el aumento de estudiantes universitarios ha sido otro de los extremos exhibidos por García-Page para ensalzar el Estatuto de Autonomía que cumple 40 años; sumando la evolución de las infraestructuras o el alza en los kilómetros de autovía.
En este repaso, ha continuado hablando de los avances en atención a la discapacidad, una de las cosas por las que decidió "militar en la política".
Aquí, García-Page ha recuperado una premisa ya enunciada en el pasado, como la opción de que Castilla-La Mancha sea generadora de energía renovable de forma excedentaria para ceder a otras comunidades autónomas como Madrid, que no puede hacerse cargo por falta de espacio de generación de este tipo.
Más allá de la "solidaridad del agua" --ha deseado que no sea el clima el que acabe por dejar "las cuentas claras"--, ha citado en este punto la "solidaridad del sol", la que, según ha dicho, está dispuesto a poner a disposición de quien lo necesite.
El desarrollo de las energías renovables "ha generado ya más de 10.000 puestos de trabajo" en Castilla-La Mancha, y esta tierra, "que sabe hacer de la necesidad virtud", va a seguir en esta apuesta.
Más vivienda -600.000 nuevas construidas- y el 94% con acceso a banda ancha han sido otros de los extremos que García-Page ha puesto encima de la mesa para analizar las últimas décadas de historia castellanomanchega.
Abriendo el capítulo económico, ha dicho que este Gobierno es "experto" en salir de las crisis, y va a salir también de ésta. "Se saldrá de Putin como se salió de los recortes", ha abundado, recordando que la sociedad europea y mundial está asumiendo "en común" las derivaciones de la presión económica a Rusia.
La situación tras la pandemia que ha tenido que gestionar su Gobierno es, según sus cálculos "cuatro veces" peor de lo que le tocó gestionar a Barreda; y el doble de lo que afrontó María Dolores de Cospedal.
"Ya sé que el señor Núñez dirá que estoy obsesionado con Cospedal. Pero no es obsesión. Usted y yo estamos agradecidos a Cospedal. A usted porque le puso, y yo porque tuve el honor de poder desalojarla. Estamos vinculados", ha bromeado desde la tribuna.
Con todo, "y a pesar de Putin, el Covid y la herencia de los recortes, con este Gobierno alcanzamos en 2019 el PIB más alto de nuestra historia", ha exhibido García-Page.
El papel de la Unión Europea ahora "aúna más esfuerzos" porque "cree más" en sus propias posibilidades, frente a un "populismo barato y populista" que surgió "de la crisis de 2007".
Un populismo que además "no tenía ni idea ni de lo que pasaba" y que ahora está "en retroceso claro", algo que hay que "celebrar", porque "es el tiempo del realismo".