Hace unos días se cumplían cinco años del fallecimiento del entrenador talaverano —aunque nacido en Madrid— más laureado en toda la historia de nuestro fútbol local. Además, Javier fue el primer jugador de Talavera que jugó en Primera división.
Buena ocasión, sin duda, para rememorar su recuerdo, que asimismo queremos hacer extensivo al que durante muchos años fuera “nuestro querido señor de los líos”, el incomparable Ricardo Martín Colmenero, RIMACO. Seguro que ya juntos seguirán hablando de fútbol, que era la pasión —junto a sus familias— de los dos.
Un fuerte abrazo allá donde estéis. Mientras, nuestro vate os quiere ofrecer este peculiar epigrama titulado ¡Entre ellos y yo! ¡Que lo disfruten ustedes y tengan un buen fin de semana!
Calla, me pides. Si soy mudo.
¿Cómo cantar? No tengo oído.
Pero sé que mi manera de amar
tú la abrazabas; y soy poseído
de tu pasión. Ahora me pides que ore.
¿A quién? Si no tengo dios ni santo
que por mis muchas penas llore.
Me vuelvo a dormir. Despierto
y dejo que vuelen mis sueños.
Y éstos se posaron en el desierto
Aquél, donde Javier y Ricardo
—talaverano y charro—
hoy víspera del Corpus,
nos miran con ojos risueños…
El Ciego del Berrenchín