El mensaje, que corre como la pólvora a través de la red social Twitter, explicando que su perro se ha comido uno en la zona de Puerta de Cuartos.
Este método ha causado gravísimos daños a las mascotas. A pesar de que la legislación contra el maltrato animal se ha endurecido en los últimos años, y que ya han sido detenidas varias personas por agredir a sus mascotas, no dejan de aparecer ejemplos de extrema crueldad.
El animal, nada más comerse el alfiler puede dañar las paredes del esófago en su camino de llegada al estómago. Una vez allí, quizá el dueño no detecta los síntomas del peligro, pero después de un tiempo, el animal puede dejar de comer o de defecar.
Es entonces cuando los propietarios de las mascotas suelen llevarlos a la clínica. Ante la sospecha de que haya comido un cuerpo extraño, los veterinarios hacen una radiografía.
Lo peor es cuando el alfiler llega al intestino, porque si se queda mucho tiempo alojado ahí puede producir una necrosis (cuando una parte del tejido muere) o, mucho peor, la rotura del intestino, que puede desembocar en la muerte.