La alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, ha presentado el nuevo Plan de Ordenación Municipal (POM) que recoge un proyecto de 12.000 a 18.000 viviendas en suelo urbanizable —donde no hay nada—, la ampliación del centro comercial del parque comercial Abadía, la regeneración de los barros de Palomarejos y Santa Bárbara así como un proyecto en Vega Baja libre de construcción de viviendas.
En rueda de prensa, la primera edil ha señalado que ahora se abre un proceso de participación para que ciudadanos, asociaciones, organismos y entidades hagan sus aportaciones hasta el mes de diciembre y se pone en marcha la página web POM Toledo, que será una ventana para consultar los detalles de este proyecto de ciudad con un horizonte a 15 o 20 años vista.
La previsión es que el documento final esté listo aproximadamente en enero de 2023 y la alcaldesa ha confiado en que, tras la reunión para presentar el proyecto que ha tenido lugar este jueves, sean capaces de llegar a un acuerdo con los grupos políticos de la ciudad.
Asimismo, ha admitido que con las elecciones municipales a un año, el proceso de este POM se puede ver afectado, aunque confía en que los intereses partidarios no influyan en su desarrollo.
Se estructura en cinco ejes para hacer de Toledo una ciudad sostenible, saludable, segura, social e inteligente y se pone como reto llegar a los 100.000 habitantes.
"Frente al carácter expansivo del POM de 2007, con 31 millones de metros cuadrados urbanizables y más de 58.000 viviendas, aquí se plantea una superficie urbanizable de 10 millones de metros cuadrados y un máximo de 18.000 viviendas" en diez nuevos sectores a desarrollar para uso residencial, además de las que se puedan construir en el terrenos que actualmente son urbanos y que no se han desarrollado, y de las que sean rehabilitadas.
Se ha referido, a preguntas de los medios, a la llamada zona de contacto entre el barrio de Santa Bárbara y el Parque Comercial 'Fusión', que es de uso terciario y pasará a suelo de uso residencial para permitir la construcción de viviendas y cohesionar y coser la ciudad.
Tolón ha incluido dentro del proyecto la línea de Alta Velocidad Madrid-Extremadura con una nueva estación a su paso por Toledo en la zona del Polígono con el fin de compatibilizarla con el transporte de mercancías, sin perjuicio del mantenimiento, en todo caso, de la estación de Santa Bárbara para la línea de alta velocidad Madrid-Toledo.
La alcaldesa ha comentado que vinculado con el desarrollo socioeconómico, y dado el buen funcionamiento de ese sector, el POM propone la ampliación de la zona comercial de La Abadía, con 177.000 metros cuadrados, que conllevará, en cualquier caso, un estudio de movilidad.
Asimismo, se contempla además como "esencial y básica" la conexión del acceso sur del hospital universitario con la A-42, en la zona con conocida como Cuesta de las Nieves, así como la conexión de enlace de la TO-22 con la CM-4001 y con la N-400 que uniría el Polígono con Acucaica por el puente sobre del río Tajo en la zona este.
La alcaldesa se ha congratulado de que en el Ministerio se tenga en cuenta el estudio de la conexión de estos barrios, cuando hace años no había estado en la agenda del mismo con el Gobierno de Mariano Rajoy.
Acerca de los problemas de tráfico en el barrio del Polígono al mediodía coincidiendo con la salida del trabajo, ha remarcado que el tercer carril de ida y vuelta que salga de la calle Jarama y que lleva aparejado la construcción de una rotonda es un proyecto que ya está en el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana a la espera de que se apruebe y empiecen "las obras cuanto antes".
"Está entregado, lo están viendo los técnicos y no quiero decir plazos, porque la aprobación inminente por parte del Estado pueden ser meses. Por fin el proyecto está hecho y va a desahogar muchísimo la salida de los trabajadores de esta zona", ha señalado Tolón.
Además, ha hecho referencia al proyecto de carril de emergencia para vehículos sanitarios que ha elaborado el Ayuntamiento por si se dieran problemas de accidentes o colapsos.
Del mismo modo, el documento contempla el refuerzo del Camino de Albarreal como salida de la urbanización de La Legua y su conexión con la circunvalación CM-40; al nuevo puente sobre el río Tajo en la zona oeste de la ciudad para cerrar el circuito conectando la carretera a la Puebla de Montalbán, CM-4000, con la rotonda de acceso al Camino de Albarreal, y a la nueva conexión de Valparaíso para enlazar con la zona norte del barrio de Buenavista.
Recuperar la relación con el Tajo y convertirlo en eje vertebrador de la ciudad es otro de los objetivos, por lo que se plantea el acondicionamiento integral de la ribera en el tramo del Casco Histórico y su continuación hasta la Fábrica de Armas, la instalación de una pasarela en el puente Nuevo de Alcántara, la recuperación de la antigua vía de ferrocarril a Bargas que cruza el río y conecta Santa Bárbara y Azucaica, y la renaturalización de las riberas del Tajo en La Peraleda.
"Nos proponemos también la recuperación de la Vega Baja con un planteamiento de respeto del patrimonio arqueológico, paisajístico y medioambiental y con intervenciones para promover el uso y disfrute de la ciudadanía", ha señalado la alcaldesa, además de zanjar la construcción de viviendas en este espacio: "Se suprime cualquier posibilidad de construir viviendas en la Vega Baja".
La revitalización del Casco Histórico es otro de los objetivos reduciendo "la presión turística y compatibilizándo el desarrollo del turismo con el bienestar de los residentes, además de propiciar las condiciones para aumentar sus habitantes", garantizando el acceso a la vivienda, ampliando los recursos básicos para la población residente y regulando las viviendas de uso turístico".
Igualmente, el documento presentado plantea la regeneración urbana de los barrios de Palomarejos y Santa Bárbara con criterios de cohesión social, perspectiva de género, calidad en el espacio público, eficiencia energética, accesibilidad y conectividad.
En el caso de Palomarejos, el traslado de la Guardia Civil a La Peraleda y el cierre del hospital Virgen de la Salud se concibe "como una oportunidad para garantizar el bienestar del barrio y el mantenimiento de los servicios con la construcción de vivienda nueva en los espacios ocupados por ambas infraestructuras".
En cuanto a las actividades económicas e industriales, se propone aumentar en 3,6 millones los metros cuadrados destinados a suelo industrial en el Polígono, potenciando su carácter logístico y también para empresas asociadas a la investigación, el desarrollo y la innovación.
Además, se pretende fomentar la actividad científica ligando estos desarrollos con los programas de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) como centro de referencia en el ámbito académico y de formación de personal cualificado.