Eurocaja Rural prosigue su ambicioso Plan de Expansión por Castilla y León, y en concreto por la provincia de Valladolid, abriendo una nueva oficina en la localidad de Íscar con la finalidad de proporcionar soporte financiero al municipio y contribuir al desarrollo económico y social en la zona.
La oficina está ubicada en Calle Mayor, número 22 (una de las principales vías de la localidad, muy cercana a la Plaza del Ayuntamiento), dispone de los últimos avances tecnológicos y tiene horario continuado de atención al público de 8:30 a 14:00 horas. Al frente de la misma se encuentra Javier Benito Manso junto a la gestora comercial Carlota Villares Rubio, quienes ofrecen el amplio catálogo de productos y servicios que caracterizan a la entidad financiera.
La apuesta de la entidad financiera por Castilla y León es patente desde 1997, fecha en la que abrió su primera oficina en Candeleda (Ávila), y en la provincia de Valladolid desde agosto de 2021, cuando aperturó nueva oficina en la capital. Tanto es así su vocación de servicio y compromiso con la zona que actualmente Eurocaja Rural supera ya la veintena de oficinas en la comunidad autónoma, alcanzando su red comercial en conjunto las más de 400 en todo el ámbito de actuación donde opera: Castilla-La Mancha, Madrid, Ávila, Comunidad Valenciana y Murcia.
Eurocaja Rural se asienta en Íscar para generar actividad, riqueza y empleo, atender con cercanía y profesionalidad a sus socios y clientes, y para ofrecer asesoramiento personalizado y soluciones financieras a sus habitantes, contribuyendo así al desarrollo económico y social de un municipio que cuenta con más de 6.000 habitantes. Una oficina que se suma a las ventajas que ofrece también la banca online, pues Eurocaja Rural combina tanto la omnicanalidad de las nuevas tecnologías como el servicio de proximidad y cercanía característico de la presencia física de oficinas.
Con esta nueva oficina, la entidad financiera constata su firme postura por contrarrestar la tendencia actual de cierre de centros de trabajo, reestructuraciones y despidos acometidos por el sector financiero, anteponiendo en su lugar la generación de empleo, la lucha contra la exclusión financiera y la generación de oportunidades a través de la accesibilidad al crédito y liquidez que reactiven la economía.