La consejera de Igualdad y portavoz del gobierno de Castilla-La Mancha, Blanca Fernández, ha avanzado que el Consejo de Gobierno ha dado luz verde al decreto por el que se regula la concesión directa de subvenciones dirigidas a personas trabajadoras autónomas y pymes, destinadas a fomentar el trabajo a distancia, "como medida para favorecer la conciliación y asegurar el nivel de empleo". La convocatoria está dotada con un millón de euros, aunque se podría ampliar con 500.000 euros adicionales.
Según ha detallado la consejera en rueda de prensa celebrada en Ballesteros de Calatrava (Ciudad Real) para dar cuenta de los asuntos tratados por el Consejo de Gobierno, la cuantía de la subvención será de 700 euros por cada puesto que pase de presencial a distancia y de 3.000 euros para cada contratación nueva de un puesto a distancia.
Estas cuantías se incrementarán en un 20% si se trata de mujeres o personas con discapacidad. También aumentarán entre un 20% y un 40% en zonas escasamente pobladas o en riesgo de despoblación, de manera gradual.
Por otra parte, la consejera ha anunciado que el Gobierno regional ha empezado a realizar los pagos correspondientes al bono social término al que se destinan casi 19 millones de euros para más de 76.000 familias, "más del doble que el año anterior", que recibirán ayudas directas que oscilarán entre los 128 y los 373 euros.
Fernández ha señalado que este bono es una ayuda directa destinada a compensar los gastos de suministro de energía para usos térmicos, como calefacción, agua caliente sanitaria o cocina a todos los beneficiarios del bono social eléctrico a 31 de diciembre del año anterior. La cantidad que perciben se calcula conforme a la zona climática y al grado de vulnerabilidad del hogar, y se hace en un pago único.