Las delegaciones rusas y ucranianas viajaron ayer a Estambul, donde se sentarán de nuevo a la mesa para negociar un alto el fuego, mientras los combates en Ucrania no disminuyen en la trigésima tercera jornada de la campaña militar rusa en el país vecino. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, afirmó que ayer “las delegaciones se dirigen a Turquía”. “Esperamos que hoy teóricamente pueda ocurrir” la negociación, dijo, dejando no obstante abierta la fecha del comienzo del encuentro ruso-ucraniano en Turquía.
¡Que se acabe esto ya!
¡Brava nación es Ucrania!
Con qué vigor te sostienes
ante las bombas que lanzan
los invasores que quieren
la destrucción de tu raza.
Sé que te ronda la muerte
desde la noche hasta el alba.
Sé que lloras por el hijo,
por tu padre y por el marido
que han querido defenderte.
Sé que no guardas rencor,
solo el valor de ser fuerte
viendo luchar a los tuyos
por las calles y en el frente.
¡Qué fortaleza y valor!
Nunca dobléis vuestra frente
aunque duelan los castigos;
sed fuertes como las águilas,
cual leones con sus zarpas.
¡Se lo dices hoy a tu gente!
No os entreguéis a la suerte
de Ucranica sometida
por bastardos intereses.
Que la libertad es gloria
que bien merece la muerte.
Hoy se dialoga en Turquía
buscando el fin de la guerra
y el final de una invasión,
que acabe con la agonía
de vuestra brava nación.
Que nuestro Dios ilumine
a los que han de negociar.
Todo el mundo entero pide
que vuelva pronto la PAZ,
la concordia y que camine
por senderos de bondad.
Que todos pongan el alma
en buscar un buen acuerdo;
que es necesaria la calma
para nuestra humanidad.
Como dijera el 'POETA':
“Que no se precisan yugos
sobre el cuello de una raza”.
Ni muertos, ni prisioneros,
ni viajeros con maleta
pidiendo en país extraño
de leche una simple taza.
Es martes final de marzo;
día para la esperanza
que frene ya tanto daño.
Señores negociadores
en vuestras bocas lo dejo
con este breve consejo:
sellad, sí, un buen acuerdo
que sin él no hay vencedores,
todos somos perdedores.
Ucranianos de braveza;
Rusos de trigo y centeno:
El mundo entero que reza
os pide un acuerdo bueno.