Había reminiscencias del pasado reciente; al menos en un equipo visitante que en palabras de su entrenador Víctor Cea había declarado “que se encontraban con ganas de revancha tras el injusto 0-1 —gol de Balsegas— en la ida de El Prado”. Era la previa del Zamora-Talavera y la prensa local aseveraba que se trataba de un partido a “vida o muerte”, tópico tantas veces empleado en esto del fútbol y no muy apropiado en una actualidad que marca la guerra de Ucrania; bueno, para aplicarse al pensamiento del cronista: la injusta invasión rusa.
¿Para quién aplicamos el titular? Pues para ambos, que estaban en zona de descenso a falta de diez jornadas —diez finales— para consumar el objetivo primordial: mantenerse en la categoría. Paradojas del destino que marcan los horarios que imponen las televisiones, ambos equipos saltaron al Ruta de la Plata con una mala noticia: el rival que marca la salvación —los cachorros del Bilbao de Patxi Salinas— se distanciaban tres puntos tras imponerse (1-0) al colista Tudelano. Con este conocimiento sólo servían los tres puntos para cualquiera de los dos. De no conseguirse, fracaso momentáneo, que no definitivo con 27 puntos aún en juego. Y tanto Yago Iglesias como Víctor Cea lo sabían. ¿Qué habrían dispuesto tácticamente para arrimar la ascua a su sardina? En cuanto empezase a rodar el balón podríamos dar respuesta.
Para “lamentos”, pues que se los repartan: si Cea no podía contar en el equipo ni con Jon Ceberio —titularísimo desde que está en Talavera— o Adighibe —en pleno proceso de recuperación— y repetía con los que golearon al Bilbao B, Iglesias tampoco podía hacerlo con César Yanis, que estaba con su selección, Jon Villanueva, Juanan ni Cordero y aunque recuperaba al sancionado Dani Hernández, éste no era de la partida. Pues a improvisar, señores. Balón a rodar por parte del Talavera y ¡a jugar!
Doce minutos pasaron sin un dominador claro con el cuero de una parcela a otra, pero con poca profundidad y escaso peligro. Y en ese minuto la tuvo el equipo local sin que pasara a mayores. ¿Era un aviso de lo que podría venir? Pues la verdad es que no y sí cuatro saques de esquina consecutivos del Talavera —en uno de ellos reclamaron manos de un jugador local— que solo hicieron “amenazar” al Zamora, pero sin llegar a crear un peligro inminente para los intereses de Pau Torres y los suyos. Se había cumplido media hora de juego y ni unos ni los otros pasaban por agobios. Se mantenía el 0-0 que en nada favorecía los intereses los dos equipos.
Las evidencias de lo mucho que había en juego eran las imprecisiones de casi todos y la salvaguardia de la zona de la verdad —las áreas— que apenas pisaron los delanteros de ambos equipos, a excepción de Losada y Adri Herrera a siete minutos del descanso. La cartulina a Cea y Javi Domínguez —con daño en el hombro izquierdo para Adri Herrera que debió abandonar el terreno de juego— propiciarían la última ofensiva de los rojiblancos sin resultado y que el trencilla valenciano añadiera dos minutos de prolongación y en los que Rodrigo remató desviado un balón llovido. Se entraba en los minutos de reflexión obligada.
Dieguito entraba en juego por el lesionado Adri Herrera; era la única novedad porque Cea siguió con los mismos que acabaron. Actividad para el preparador físico blanquiazul porque Cea mandó calentar a tres de los suyos de una tacada nada más ponerse el balón en juego. Con seis minutos de este periodo Bourdal mató moscas peligrosas en su área y la contra que inició Vícente Romero con prolongación para Dani Pichín, cuyo centro le llegó a Toño Calvo para empujarla al fondo de la red y situar un esperanzador 0-1 en el marcador. Quedaba partido y los de Cea deberían ajustarse en defensa, anticiparse en medio campo y aprovechar lo que le llegara en vanguardia; ingredientes sin pasarse de condimentos; verbigracia: no cometer esos despistes que en otras citas han costado puntos y derrotas. Espejo tuvo su ocasión en un saque de esquina que no lo fue y Xisco Campos por una fea entrada recibió la amonestación. Todo esto en el primer cuarto de hora.
Yago Iglesias se vio obligado a efectuar un doble cambio con media hora por delante. Kepa y Dani Hernández —que había cumplido una jornada por acumulación— saltaron al campo como posibles revulsivos. Ató cabos Cea con la entrada de Monroy por Dani Pichín. ¿Para contener? No parecía ser necesario, porque Monroy marcó en el 67 aunque en fuera de juego y el Zamora no daba muestras de poder revertir la situación. Con 20 minutos por delante un ordenado Talavera parecía tener controlada la situación con posesiones largas y sin rifar el balón para desesperación de la parroquia local.
Y a doce para los 90 ambos banquillos se movieron; Javi Navas y Jon Rojo entraban por Luque y Jordan en los de Zamora y Forgas cubría la plaza de Toño Calvo. Y un yerro del meta Pau Torres no supo aprovecharlo Rodrigo para “matar” el partido mientras Víctor Cea daba instrucciones a su tocayo Víctor Ruiz en banda para entrar por David Añón. Había que poblar el medio campo y sin tiempo para posicionarse, el Zamora estuvo cerca del empate en un remate de Navas que Sousa despejó a la esquina. Y en su ejecución percance para Edu Sousa que tuvo que ser atendido sobre el campo. A la desesperada, pero sin precisión, lo intentaban los rojiblancos y el Talavera esperaba a la contra; un córner acabó con el balón en la red de Sousa, pero sin validez cuando el cuarto árbitro señalaba cinco de añadido.
Y en el último minuto —de nuevo se repite la historia negativa para los blanquiazules— Dieguito empuja un balón al que no llegaron ni los centrales ni el lateral talaverano. Todo el trabajo a la basura. Y lo habíamos advertido. Ahora a esperar el sábado en El Prado al UD Logroñés, mientras el Bilbao B —el rival que marca la salvación— ya tiene 3 puntos más en su zurrón porque le toca medirse al Extremadura UD. Toca seguir sufriendo, aunque no se pierda la esperanza. Empate a uno que no es bueno ni para Zamora ni para Talavera cuando, como decíamos, restan 29 por disputarse. En fin…
ZAMORA CF: Pau Torres; Dani Espejo, Xisco Campos, Jordan Sánchez (Jon Rojo 78’), Carlos Ramos, Jorge Fernández, Garay, Adri Herrera (Dieguito 46’), Luque (Javi Navas 78’), Losada (Kepa 62’) y Baselga (Dani Hernández 62’).
CF TALAVERA: Edu Sousa, Choco, Javi Domínguez, Tomi Bourdal, Góngora, Vicente Romero, Dani Pichín (Pablo Monroy 63’), Jordi Ortega, Rodrigo, Toño Calvo (Forgas 78’) y David Añón (Víctor Ruiz 84’).
ÁRBITRO: Sergiu Claudio Muresan Muresan con Alain Perea Romero, ambos valencianos y el vasco Xabier Gómez Landazabal. Cartulinas para Xisco Campos y Adri Herrera —ya en el banquillo— por el Zamora, y a Víctor Cea y Javi Domínguez—no podrá alinearse el sábado ante el UD Logroñés— por el CF Talavera.
GOLES: 0-1. Minuto 51. Toño Calvo. 1-1. Minuto 90+4. Dieguito.
INCIDENCIAS: Ruta de la Plata. Tarde del domingo para afrontar la jornada 29ª. Regular entrada (1668 espectadores) en un campo de grandes dimensiones y capacidad de 7.000, con cerca de un centenar de aficionados talaveranos en las gradas.
Valladolid Promesas, 2: Extremadura UD, 0 (Retirado)
Badajoz, 2; Real Unión Irún, 1
Leonesa, 3; Calahorra, 0
Rayo Majadahonda, 4; Unionistas, 3
UD Logroñés, 1; DUX Internacional, 1
Celta B, 2; Deportivo, 1
Real Racing Santander, 1; SD Logroñés, 0
Bilbao At. B, 1; Tudelano, 0
Zamora CF, 1; CF Talavera,1
Racing Ferrol, 1; UD Sanse, 0
Sanse-Racing Santander, viernes 1: 21:00 Horas.
Tudelano-Valladolid B, sábado 2: 17:00 Horas.
CF Talavera-UD Logroñés, sábado 2: 17:00 Horas.
Deportivo-Rayo Majadahonda, sábado 2: 19:00 Horas.
Unionistas-Zamora, sábado 2 sábado: 19:00 Horas.
Calahorra-Racing Ferrol, domingo 3: 12:00 Horas.
SD Logroñés-CD Badajoz, domingo 3: 12:00 Horas.
Real Unión-CyD Leonesa, domingo 3: 17:00 Horas.
DUX Inter-Celta B, domingo 3: 17:00 Horas.