Algunas historias tienen final feliz. El pasado 18 de enero, un coche salió ardiendo junto al nuevo restaurante que KFC ha abierto en el barrio del Polígono de Toledo.
El dueño del coche se vió obligado a detener su marcha allí en búsqueda de un taller, tras notar un fuerte olor a quemado procedente del motor. El fuego fue sofocado por los bomberos y no hubo que lamentar daños personales.
Al enterarse de lo sucedido, KFC quiso compensarle con un coche nuevo. Para ello usó las redes sociales para lanzar una campaña de búsqueda del propietario del vehículo.
El primer tuit solicitando la ayuda (publicado el pasado viernes día 18) sumó más de 1,5 millones de impresiones impresiones y 70.539 interacciones.
La búsqueda ha resultado un éxito y en tan solo 24 horas han encontrado al hombre para darle la buena noticia.
KFC ha entregado este lunes el vehículo - un Seat Toledo- a Rubén Gamero.