Emiliano García-Page, ha comentado uno de sus momentos más duros como presidente de Castilla-La Mancha: “he sufrido mucho, hasta el punto de tener que medicarme.
En una entrevista con Radio Televisión de Castilla-La Mancha ha admitido que hubo un momento en pandemia en el que llegó a pensar que la mejor opción era "dejar paso". "En los momentos más duros, con experiencias muy duras, me llegué a plantear hasta dejarlo todo”, ha relatado García-Page.
Después de una situación sanitaria que en los primeros compases de la crisis del Covid-19 "destrozó" a Castilla-La Mancha, ha rememorado el día en el que del hospital de Toledo salieron 80 féretros con otros tantos fallecidos por coronavirus.
El presidente de la región ha puesto en valor el trabajo realizdo por los profesionales snitarios y por el consejero de de Sanidad, "de los mejores de España", ha enfatizado.
Pero, si algo le hizo cambiar de opinión "fue la gente". "Este país ha reaccionado mejor que nadie", ha celebrado.
García-Page también ha aprovechado para incidir en que Castilla-La Mancha es, "con mucha diferencia", la comunidad que más recursos ha empleado en luchar contra el virus.
Por otro lado, preguntado por si volverá a ser candidato del PSOE para comandar la Comunidad Autónoma, ha afirmado que no tiene ninguna prisa por desvelar la decisión, reparando en que su trabajo ahora es comandar la región como líder del Ejecutivo y no estar en cálculos electorales.
En todo caso se siente en el "mejor momento de plenitud política", con "tranquilidad de decir" todo lo que piensa y sin que nadie le lame para "echar una bronca".
Pero, ha dicho, es presidente y no tiene "prisa" por tomar la decisión.