Almudena Parejo Amor, más conocida como Almudena Amor, es la nueva revelación del cine español. Con tan solo 27 años ya ha trabajado con directores de la talla de Fernando León de Aranoa, en ‘El buen patrón’ y con Paco Plaza en ‘La abuela’. Almudena es madrileña, pero sus raíces están en Lagartera (Toledo) y presume de ello allá donde va, “poder compartir mi éxito con mi pueblo me hace el doble de feliz”.
Desde La Voz del Tajo hemos tenido la suerte de charlar con Almudena y conocer más a fondo a la nueva promesa de nuestro cine, que muy pronto también podrá ser reconocida fuera de nuestro país, puesto que ‘El buen patrón’ es la película preseleccionada para ir a los premios Oscar el próximo 27 de marzo.
Almudena está nominada a mejor actriz revelación en los premios Goya y a mejor actriz de reparto en los Feroz gracias a su papel en ‘El buen patrón’.
Para la joven actriz estar nominada a dos de los grandes premios de nuestro país es todo “un reconocimiento por parte de mis compañeros, significa que más gente se va a fijar en mi trabajo”. Almudena se muestra muy agradecida e ilusionada con sus dos candidaturas, “en los Feroz estoy nominada con actrices que llevan muchísimo tiempo y eso para mí es como un regalo”, asegura la joven.
La madrileña sigue con los pies en el suelo, “no barajaba la posibilidad de estar nominada en los Feroz, daba por hecho que no me iban a nominar, pero me ha hecho muchísima ilusión”. Y aunque asegura que todavía no se ha preparado ningún discurso, porque le gusta mucho improvisar, tiene pensado escribir “algo sencillo” dos días antes “por si acaso”.
Almudena estudió publicidad mientras lo compaginaba con trabajos de modelo. Cuando cumplió 22 años se dio cuenta de que su verdadero sueño y lo que realmente le llenaba era ser actriz y decidió apostar por ello.
"Es un buen momento para el cine en España
“Yo soy una chica muy soñadora y en el momento en el que empecé a estudiar interpretación con 22 años dije quiero hacerlo y voy a lucharlo hasta el final, tengo que ir a por todas” y aunque aspiraba a trabajar con los grandes directores de nuestro país, nunca pensó que “llegaría tan pronto y de esta manera”.
Se dio cuenta de que quería ser actriz porque cuando estaba haciendo las prácticas de la carrera de publicidad en una agencia “no era tan feliz como yo sentía que podía ser en un trabajo”. Fue en ese momento cuando le cambió el chip y pensó “¿por qué no estudio interpretación e intento que me cojan para lo que de verdad quiero?”.
Después de trabajar con Fernando León de Aranoa y Paco Plaza mucha gente le dice que ya todo va a ir hacia abajo, pero Almudena no es para nada una persona pesimista y sus aspiraciones son altas. “Me gusta mucho Sorogoyen, Carlos Vermut, Carla Roquet… hay mucha gente con la que me gustaría trabajar”, comenta la actriz madrileña y explica que ha empezado “con dos grandes proyectos y eso es algo que también puede dar miedo, pero al final pienso que cada proyecto me va a aportar una cosa y últimamente hay muchos proyectos de calidad y eso motiva mucho. Este año han salido un montón de películas de nuevos directores, es un buen momento para el cine en España”.
"Como actriz estoy abierta a todos los géneros siempre que haya un reto y pueda aprender algo”
Almudena ha demostrado que es capaz de interpretar cualquier género, sus papeles en ‘El buen patrón’ y ‘La abuela’ son muy distintos, y sin embargo, encaja en los dos a la perfección. La actriz se prepara los personajes pensando e imaginando mucho, “también rebusco dentro de mí y la música me ayuda mucho”. Almudena confiesa que “cada personaje te exige conectar con unas partes u otras de ti mismo” y por eso se ayuda del vestuario del personaje, el pelo, leer muchas veces el guion… “no hago nada demasiado raro”. “Todo lo que tiene que ver con lo sensorial y la forma de moverse de cada personaje, me ayuda mucho a construir a una persona diferente a mí”.
Almudena confiesa que interpretando los dos géneros se ha sentido muy cómoda y le gustan ambos, “al final no es tanto el género sino que la peli sea buena”. “Como espectadora no soy mucho de pelis de acción o superhéroes, pero como actriz pienso que tendría que ser súper divertido hacer un catwoman. Una cosa es verlo y otra hacerlo. Como actriz estoy abierta a todos los géneros siempre que haya un reto y pueda aprender algo”, explica la joven.
Antes de ser actriz, Almudena Amor hizo algunos trabajos como modelo, aunque nunca se llegó a considerar una profesional del modelaje, “al final lo hacía para sacar dinero mientras estudiaba la carrera, pero nunca sentí que se me diera tan bien como para poder dedicarme a ello, ni que me gustase tanto”.
Ahora, tiene claro que se quiere dedicar al cien por cien a la actuación, aunque como actriz a veces tenga que posar en el photocall y hacer muchas sesiones de fotos, “pero ya va desde otro lugar, como modelo sentía que tenía que llegar a lo que el resto del equipo estaba esperando ver en mí, daba igual quien fueses, pero ahora como actriz realmente soy yo la que está ahí, importa la persona que hay detrás”. Es por ello que ahora siente “mucha más calma, porque no tengo que llegar a nada”.
Por ahora solo ha actuado delante de la cámara, pero “me apetece hacer teatro en algún momento. Me interesa, me gustaría vivir los ensayos y ponerme a hacer la obra con el calor del público”. Almudena asegura que comenzó haciendo teatro de adolescente y le encantaba.
"He aprendido como persona, pero en esencia sigo siendo la misma”
Aunque su fama es reciente, muchas personas ya la reconocen por la calle y se paran a saludar. “Me pongo roja, no estoy acostumbrada, pero me hace ilusión porque al final toda la gente que se me ha acercado es para decirme que le ha gusta mi trabajo, al final nadie ha venido a decirme nada feo”.
Almudena se mantiene con los pies en la tierra y asegura que su vida no ha cambiado tanto, “Ha sido un proceso bastante natural. Mi círculo se ha ampliado y tengo que hacer cosas que antes no hacía, pero realmente yo como persona creo que he madurado y que me conozco mejor a mí misma. He aprendido como persona, pero en esencia sigo siendo la misma”.
En abril participará en una nueva película y tiene varios proyectos en marcha. Almudena es consciente de que es una profesión “donde al final estas en una situación vulnerable, porque no es lineal”. Y aunque no sabe lo que le durará el éxito ni la fama, está contenta porque “me gusta mucho mi trabajo”.
Aunque nació en Madrid, Almudena ha pasado todos los veranos de su infancia en Lagartera con sus abuelos, donde aprendió “todas cosas esas cosas que una ciudad no te puede aportar”. La actriz asegura que es una suerte “haber tenido ese espacio para crecer y estar con mis abuelos, estar más en contacto con el campo, con mis vecinas… yo en Madrid no tengo relación con mis vecinas y al final en el pueblo son mi familia”.
No se olvida de sus orígenes y sigue volviendo para pasar tiempo con los suyos “al final es mi raíz y es una de las cosas que más feliz me hacen. Te conocen desde que eres pequeña, saben quién eres, se crea un amor muy bonito”.
Todo el municipio está muy orgulloso de sus logros y eso para Almudena “es súper bonito y le da mucho más sentido a todo esto. Poder compartir mi éxito con mi pueblo me hace el doble de feliz”.
Almudena sigue siendo esa chica humilde y soñadora que veraneaba en Lagartera y aunque en un futuro cercano estará en todas nuestras pantallas, para ella la clave del éxito siempre será “tener los pies en la tierra”.