Tanto la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), Raquel Sánchez, como el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, han anunciado recientemente la necesidad de planificación de infraestructuras, como el próximo trabajo en el tramo del AVE Madrid Oropesa (Madrid-Lisboa) o las autovías A-32 y A-40.
Tras la reunión de este jueves en Palacio de Fuensalida de Toledo, sede de la Presidencia regional, que han tenido Sánchez y García-Page, se ha concluido que ha sido una reuniñon ''más que productiva''. En ella se han marcado las prioridades de Castilla-La Mancha, principalmente.
Se piensa destinar un total de 130 millones de euros del Plan de Recuperación para infraestructuras, seguridad, entornos urbanos, movilidad y patrimonio.
Los planes se centran en la construcción del tramo de la A-32 (Bailén-Albacete); la variante de Puertollano; y el estudio informativo en la A-40 entre Toledo y Ocaña. Además de los tres nuevos carriles que se piensan añadir a la N-400.
En sus planes también se incluyen pasarelas, carriles bici y sendas peatonales dentro de la mejora de la TO-23.
Además de la renovación de la línea Madrid-Sevilla, García-Page hablaba sobre el estudio del tramo de AVE Madrid-Oropesa, de la línea Madrid-Talavera-Extremadura.
Los 43 millones de euros del fondo irán destinados a la movilidad interior, tal y como lo comunicaba Sánchez.
Para finalizar, se han comentado los puntos calientes de la próxima reunión, la charla pendiente con el Gobierno de España acerca de la ley regional contra la ocupación ilegal de viviendas; todo esto con la intención ''de buscar soluciones''.