“Estas acusaciones están generando un infierno a mi cliente. Se le ha acusado de abusos sexuales a menores sin que la Justicia haya dictado sentencia. Está señalado para el resto de su vida”. Así de rotundo se ha mostrado Alejandro Ruiz, abogado de uno de los 251 miembros del clero y algunos laicos de instituciones religiosas acusados de presuntos abusos sexuales y que aparecen en el informe realizado por El País y que ha sido entregado al Vaticano.
Los casos recabados se ubican a lo largo de toda España -seis de ellos en Castilla-La Mancha- y datan desde 1943 hasta el más reciente sucedido en 2018. Son 251 los acusados de abusar de, al menos, 1.237 víctimas, aunque según las investigaciones estas cifras podrían aumentar a varios miles de presuntos damnificados.
A este respecto, el que fuera presidente del Grupo Ciudadanos en las Cortes de Castilla-La Mancha, Alejandro Ruiz, insiste a La Voz del Tajo que “las denuncias no se ponen en un periódico, se ponen en los Juzgados. Si se tienen pruebas, se va a la Justicia”, remarca. “Con este tipo de informaciones -el informe de El País- se ocasiona indefensión a los acusados y se generan ‘penas de telediario’ sin garantías procesales”.
El País señala que también han sido informadas, además del Vaticano, las órdenes religiosas a las que afectan casos de la investigación, que no están bajo autoridad de los obispos, y que la mayoría ha abierto una investigación. El 77% de los casos del informe afecta a órdenes religiosas.
Precisamente, el defendido de Alejandro Ruiz es uno de los que no está bajo las órdenes de la Iglesia. “Es profesor desde hace 22 años y ha sido apartado temporalmente de su puesto de trabajo. Está señalado públicamente de por vida aunque sea inocente”, subraya el abogado.
“Este hombre no sabe de qué se le acusa, ni quién lo hace. No sabemos si hay un denunciante, dos o tres… ni si son hombres o mujeres. Tan solo tenemos un señalamiento público. Por eso mi cliente ha pedido -el jueves 23 de diciembre- declarar voluntariamente en la Audiencia Nacional para demostrar su inocencia”, explica a La Voz del Tajo.
Preguntado por la inocencia de su defendido, Ruiz señala que “ni siquiera ha tenido contacto con la franja de edad de los menores que le o les acusan. Él trabaja en otro edificio, no había contacto”, enfatiza. Además, incide Alejando Ruiz, “mi cliente ya es culpable para parte de la sociedad, y sin haber tenido acceso a un juicio, y ni tan siquiera conocer al cien por cien de qué se le acusa”. “Y como él dice: no puedo hacer memoria de algo que no ha sucedido -en relación a los presuntos abusos sexuales a menores en un centro educativo-”.
(Alejandro Ruiz, abogado)
A este respecto, Alejandro Ruiz carga contra los medios de comunicación a quienes les pide que den la misma visibilidad a las denuncias y a las absoluciones “que hay muchas”. Y señala a El País, acusándolos de “un interés por no velar por la verdad, sino por el morbo informativo, que se desarrolla episodio por episodio, noticia por noticia”.
De igual modo, considera que este tipo de informaciones son un “ataque a las congregaciones religiosas no diocesanas, como Maristas, Opus Dei, La Salle…”, y se pregunta “por qué no se crea un correo electrónico -en relación al método utilizado por el periódico para recabar las denuncias sobre presuntos abusos sexuales- para denunciar las irregulares en otro tipo de colectivos”. “Se está criminalizando a un colectivo, el religioso en este caso, con un sesgo ideológico claro”.
Por último, el abogado Alejando Ruiz incide en la presunción de inocencia y en la obligatoriedad de esperar a la resolución judicial para criminalizar a una persona. “Recientemente hemos vivido casos de falsas denuncias de agresiones por condición sexual, donde los políticos han utilizado estas acusaciones para hacer política, sin importarles que se conozca la verdad. No podemos acusar sin sentencia judicial”, finaliza.