La Ciudad de la Cerámica, un nexo para la cultura y el deporte que lleva más de cuatro décadas acogiendo a las figuras más importantes de España y del mundo.
Talavera de la Reina es eso, la cuna de muchos deportistas, de iconos del mundo del fútbol, del kárate, del atletismo. No importa de lo que se hable, solo hay que echar una mirada a los distintos medios de comunicación, leer titulares como ‘’Talavera de la Reina, la localidad que más representantes tiene en la élite del fútbol’’.
Esa es la esencia que todos los talaveranos comparten, el orgullo y la unión que han traído los deportes.
Y no es algo nuevo, no es algo que traigan las nuevas generaciones como una novedad, como las tecnologías que traen debajo del brazo. El deporte lleva echando raíces durante décadas.
Todos conocen a Sandra Sánchez, a Paco Cubelos o a Fernando Alarza, pero, ¿y hace 40 años?
Echando una ojeada a las páginas de un ejemplar de 1981, La Voz del Tajo fue testigo de muchos de los eventos y jornadas deportivas que se vivían antaño. El inicio de lo no tardaría demasiado en consolidarse, los primeros torneos y trofeos de la época que muchas veces han llegado hasta nuestros días.
Incluso sorprende ver la cifra de participantes, hasta 500 talaveranos se atrevían a competir en este tipo de citas preparadas por el club de atletismo local. Unas cifras que, hoy en día, y mirando muy de cerca a la pandemia, llegan a sorprender.
Y es que, a tan solo un año del Mundial de Fútbol del 82, las páginas se llenaban de pequeños partidos provinciales, derbis amistosos; un espíritu competitivo que ha perdurado hasta la actualidad.
Por supuesto que muchas cosas han cambiado, sobre todo en el fútbol, porque ya no es una cosa exclusiva para los hombres. Al igual que los otros deportes, son una herramienta para la inserción, para la igualdad.
Además de esto, las páginas guardadas en la hemeroteca sacan a la luz otro tema tan candente como lo es el precio de las viviendas. Condiciones de préstamos que hoy serían impensables para las entidades bancarias.
¿A quién no le gustaría adquirir su propia casa por menos de 10.000 euros? Y es que existe una diferencia abismal entre los euros y las pesetas, solo hay que calcular lo que se podía pagar antes con 100 pesetas y lo que se puede comprar ahora con esos 60 céntimos equivalentes.
Otros tiempos y otra forma de vivir, así han pasado 40 años desde que nuestro medio dio a conocer tal día como hoy las noticias que comentamos.