El cierre de 2021 se va acercando y este año ha estado marcado por muchos acontecimientos, algunos buenos y otros que no recordamos tan buenos. El principio de año le recordamos bañado de blanco en todo el país, aunque a Talavera no llegó, Filomena inundó carreteras y calles tanto de la provincia como de CLM. El Covid también recibió con nosotros el inicio del 2021, con restricciones, que poco a poco se fueron levantando para recibir la “nueva normalidad” gracias a la llegada de las vacunas y la máxima responsabilidad de la población, disfrutando de la apertura de nuevo de la hostelería, vuelta de la cultura, salir a la calle sin toque de queda ni mascarilla —aunque ésta última ha vuelto a finales de año—; un verano mucho más relajado pero unas navidades en las que la variante Ómicron ha hecho crecer de nuevo todos los casos con un repunte considerable de contagiados en todo el país. Pero no todo ha sido pandemia y vacunas este año, Talavera ha ido evolucionando a nivel tecnológico, recibiendo nuevas empresas. Además, la Ciudad de la Cerámica ha sido una ciudad olímpica con la participación de nuestros deportistas Sandra Sánchez, Paco Cubelos y Fernando Alarza en los JJOO Tokio 2021, poniendo a Talavera en el punto más alto con el oro de Sandra. La lucha contra la despoblación también ha sido muy importante este año, con la creación de una nueva ley impulsada por Castilla-La Mancha contra la España vaciada.
Lamentablemente, el 2021 ha seguido siendo el año del coronavirus, que después de casi dos años sigue muy presente entre nosotros. A pesar de tener las esperanzas puestas en la vacuna, la variante Ómicron ha vuelto a poner al mundo alerta, generando más incertidumbre en esta sexta ola.
Un año que empezó con vaivenes, ampliando y reduciendo restricciones como medida sanitaria según iba evolucionando la propagación del virus y la vacunación. Un virus que nos ha cambiado la vida en todos los aspectos: viajes, celebraciones, visitas a los hospitales…. Y el pasaporte covid, que poco a poco se va metiendo en nuestras vida como algo casi necesario. Aunque éste no se ha impuesto todavía en todas las comunidades, si quieres viajar fuera de España es algo que necesitas 100% o, sin irnos muy lejos, en algunas de las comunidades autónomas del país son necesarias para entrar a los establecimientos, algo que por el momento Castilla-La Mancha todavía no ha contemplado.
A mediados de este año, hemos presenciado elecciones por adelantado en Madrid, en las cuales ganó Isabel Díaz Azuso con su singular gestión de la pandemia, dejando bares abiertos y haciendo bandera de la libertad en un clima de restricciones bajo el lema ‘Libertad o Comunismo’.
España ha vuelto a dar marcha atrás en esta recta final del año, entrando de nuevo en situación de riesgo alto de Covid al superar una incidencia de 400 casos por cada 100.000 habitantes. Las UCIs cada vez están más ocupadas, aunque los hospitales aún aguantan la presión.
No obstante, nuestra región tiene una de las incidencias más bajas del país, tanto a 7 como a 14 días.
En España, nueve de cada diez mayores de 12 años tienen la pauta completa, convirtiéndose en uno de los países líderes mundiales en vacunación sin bajar la guardia ante la incertidumbre que provoca el aumento de nuevos contagios. Es más, la vacunación sigue avanzando para frenar cuanto antes la expansión del virus con dosis de refuerzo a mayores de 60 años y con las primeras dosis de la vacuna a menores de 12 años, lo cual está siendo todo un éxito.
La Unión Europea también ha recuperado fortaleza para impulsar la recuperación tras el impacto del coronavirus, gracias a estos fondos España puede poner en marcha programas de recuperación con 69.500 millones de euros.
No obstante, según un gráfico que ofrece ‘Perspectivas económicas mundiales’ consultado en bancomundial, la recuperación será desigual.
Pero la pandemia ha traído consigo otros problemas debido a los cambios sociales y las restricciones impuestas por el Gobierno para frenar la expansión del virus: la salud mental. La cara opuesta de la pandemia, lo que no se ve, es el estrés postraumático, la depresión y la ansiedad; afectando mayormente a jóvenes entre 18 y 34 años.
Los trastornos mentales han aumentado considerablemente en este 2021, trayendo consigo un aumento preocupante y alarmante de suicidios también entre menores de 14 años. La salud mental se ha vuelto a poner en el punto de mira tras la reciente muerte de la actriz Verónica Forqué, dejando claro la necesidad que hay de aumentar la atención y los recursos a éste ámbito de la sanidad.