El Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas de Sudáfrica (NICD) ha sido el encargado de este reciente estudio sobre la variante del Covid-19, afirmando que los pacientes infectados por ómicron tienen un 80 por ciento menos de riesgo de hospitalización.
Este trabajo todavía no ha sido revisado por otros científicos, por lo que estas declaraciones están en el punto de mira de muchos países. Publicado en el servidor preimpresión medRxiv, es una investigación que se ha llevado a cabo gracias a dos científicas sudafricanas, Nicole Walter y Cheryl Cohen.
Uno de los puntos más importantes, que se han desarrollado en la investigación durante los meses de octubre y noviembre, es sobre la mortalidad de la variante. Se ha podido observar que su riesgo de hospitalización es menor, pero una vez ingresados, los pacientes corren el mismo riesgo de muerte que con la Delta.
Además, la variante, que está azotando a todo el mundo a pocos días del comienzo de la navidas, supone un 70 por ciento menos de riesgo de enfermedad grave.
El catedrático de Medicina de la Universidad de East Anglia, Paul Hunter, señalaba que hay un margen de error bastate grande, por lo que ''es imposible afirmar que la gravedad fuera efectivamente menor'' en los pacientes infectados con la nueva variante.
Otras universidades como la de Hong Kong respaldaban estos datos sobre el riesgo de hospitalización; sin embargo, añadían que el ómicron infecta y se multiplica 70 veces más rápido todas las variantes que se han ido viendo hasta la fecha.