Cuando nos lavamos los dientes muchas veces nos olvidamos de que también debemos hacerlo con las encías, ya que son más importantes de lo que pensamos. Desde la Academia Americana de Periodoncia (AAP), avisan de que las enfermedades de las encías o 'enfermedad periodontal', como así se llama, pueden causar sangrado de las encías, mal aliento y, de no tratarse derivar en la pérdida de piezas dentales.
Pero no queda ahí la cosa. Advierte igualmente de que la enfermedad periodontal se ha relacionado con varias otras afecciones graves, como la diabetes, las enfermedades cardíacas, y el Alzheimer. ¿Quieres ahora empezar realmente a cuidar de tus encías?
Para saber cómo podemos hacerlo de la mejor forma posible consultamos al doctor Bonilla, de la Clínica Dental Centro Médico Quirónsalud Aribau de Barcelona, quien recuerda en primera instancia que las encías son el tejido que rodea a los dientes y a los huesos maxilares que sirven para dar soporte y proteger el hueso de la agresión propia del ambiente oral y la masticación.
"Las encías sanas tienen un aspecto rosado y adherido, no móvil. Si sangran al cepillado o de manera espontánea, o su coloración cambia a un tono más rojizo e inflamado (abultado y lábil) puede estar indicando un trastorno infeccioso por placa", advierte el experto.
Es más, lamenta que entre los hábitos que más perjudican a nuestras encías se sitúa en primera posición la falta de higiene, ya que esta impide controlar los niveles de placa bacteriana.
"Otro hábito nocivo como el incorrecto cepillado puede causar retracciones por trauma mecánico del mal uso del cepillo. El bruxismo, hábito nervioso que desencadena el apretamiento de los dientes, puede causar también sobrecarga mecánica sobre la encía provocando su retracción", avisa el especialista de Quirónsalud.
Con todo ello, el doctor Bonilla enumera los principales pasos a seguir en nuestro día a día para cuidar de nuestras encías: "El primero, y el más importante, es el correcto cepillado al menos 2 veces al día. El momento más importante el de antes de ir a dormir, ya que se produce una disminución del flujo de saliva y las bacterias actúan de forma más agresiva".
Otro de los tips a seguir es tratar de controlar los espacios entre dientes, evitar el movimiento de los dientes (substituir las piezas ausentes) y así disminuir el empaquetamiento de comida que favorezca la inflamación gingival en esos espacios.
Asimismo, ve útil el empleo de colutorios y de pastas de dientes adecuados a cada situación y estado bucal, pero siguiendo siempre el consejo del dentista. "Por último, es necesario el control por parte del profesional odontológico del correcto estado general de la boca y de las encías en concreto", afirma el experto de la Clínica Dental Centro Médico Quirónsalud Aribau de Barcelona.
"El buen estado de las encías es importante ya que es un tejido muy vascularizado y, por tanto, una vía de entrada al corriente circulatorio de posibles patógenos hacia el resto del organismo. Por esa razón es muy importante el buen estado de salud de las encías en pacientes con antecedentes de patología cardíaca y prevenir riesgo de endocarditis bacteriana, así como portadores de prótesis internas", sentencia el especialista.